Venezuela invita observadores de la UE para sus elecciones presidenciales
Las autoridades electorales de Venezuela invitaron el jueves a la Unión Europea, entre otras organizaciones internacionales, a enviar observadores para las elecciones presidenciales convocadas para el 28 de julio.
Elvis Amoroso, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), indicó que giró la invitación para que participen “siempre que cumplan con los requisitos y la normativa constitucional y legal establecida”.
Los adversarios del presidente Nicolás Maduro reclaman que los comicios sean sometidos a prueba así como el sistema electoral, desacreditado luego de años signados por la inhabilitación de partidos y algunos de los candidatos opositores más populares, entre ellos María Corina Machado, la principal postulante de la oposición.
El CNE también invitó al Centro Carter, con sede en Atlanta; a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), la Comunidad del Caribe (CARICOM), expertos de las Naciones Unidas y el bloque de economías en desarrollo de los BRICS, entre otros.
El anuncio se produjo dos días después de que la autoridad electoral fijó la fecha de los comicios en los que se prevé que Maduro aspire a la reelección. El mandato de Maduro concluye a principios de 2025.
Las candidaturas podrán presentarse entre el 21 y 25 de marzo y la campaña irá desde el 4 al 25 de julio.
Algunos temen que la proximidad de la fecha de la elección y los plazos establecidos, incluido el escaso margen para inscribir candidaturas, afecten la competitividad de los comicios. También podría dificultar la conformación de una misión de observación amplia para monitorear las distintas etapas del proceso electoral.
“No da tiempo de montar misiones de observación electoral, evidentemente los tiempos son absurdos”, dijo a The Associated Press Benigno Alarcón, politólogo y profesor titular de la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas.
Las elecciones presidenciales en Venezuela —salvo excepciones puntuales como la sobrevenida por el deceso el 13 de marzo de 2013 del presidente Chávez, reelecto en octubre de 2012— han sido convocadas con una anticipación de al menos seis meses. Esta vez restan menos de cuatro meses para la elección.
“No hay posibilidad de que haya observación electoral propiamente dicha, seguramente van a tratar de tener acompañamiento para invitar algunas personalidades amigas a que vengan el día de la elección, a ver nada porque el día de la elección es muy poco lo que puedes ver”, agregó Alarcón.
Al elegir una fecha posterior el 1 de julio e invitar a observadores prestigiosos el CNE le permite a la administración de Maduro cumplir con una parte del acuerdo suscrito en Barbados en octubre del año pasado por el gobierno y una facción de la oposición venezolana, apoyada por Washington, que contemplaba que las elecciones presidenciales fueran en el segundo semestre de 2024 y planteaba trabajar en un plan que generara las condiciones políticas para realizar comicios libres y competitivos.
Por años las misiones internacionales de observadores han denunciado irregularidades que afectan a la igualdad de condiciones para competir en los procesos electorales de Venezuela, como la inhabilitación de candidatos de la oposición, el uso de recursos del Estado en la campaña y un acceso desigual a los medios de comunicación.
En Venezuela la inhabilitación política es una pena accesoria que se aplica cuando existe una sentencia judicial firme. Los críticos de Chávez y Maduro, entre ellos Machado, denuncian que la inhabilitación ha sido usada por años como un arma política.
Machado ganó en octubre las primarias de la oposición con una abultada mayoría de más de 90% de los votos.
Amoroso, que antes fue titular de la Contraloría General de Venezuela, impuso la inhabilitación política a Machado por 15 años a finales de junio de 2023. La autoridad electoral hasta ahora no ha hecho referencia a qué pasará con su candidatura.
Según la Contraloría, la exlegisladora había participado en una trama de corrupción orquestada por el líder opositor Juan Guaidó, quien se proclamó presidente interino en 2019 cuando encabezaba la Asamblea Nacional. La Contraloría no presentó pruebas.
Pero Machado no formó parte de la Asamblea Nacional presidida por Guaidó y se contaba entre sus más severos críticos.
Su inhabilitación fue ratificada a fines de enero por el Tribunal Supremo de Justicia, aunque Machado dijo que no reconoce esa resolución y ha continuado sus recorridos por el país.