Operación Spiderweb: drones ucranianos destruyen bombarderos rusos en ataque masivo
El bombardeo con drones dejó severos daños en aeronaves rusas estacionadas en el aeródromo de Belaya, según imágenes satelitales
El ataque con drones que Ucrania lanzó el fin de semana impactó de lleno en el corazón de Rusia. En las imágenes satelitales captadas tras la ofensiva se muestran claros signos de destrucción en el aeródromo de Belaya, donde varios bombarderos estratégicos resultaron gravemente afectados.
La operación, bautizada “Spiderweb”, fue ejecutada el domingo por el servicio de inteligencia ucraniano SBU, tras 18 meses de planificación. Según autoridades en Kyiv, camiones cargados con drones recorrieron miles de kilómetros dentro de Rusia antes de atacar las bases aéreas con el objetivo de arrasar la mayor cantidad posible de aeronaves.
En una rara admisión, Moscú confirmó que las fuerzas ucranianas atacaron aeródromos en cinco regiones: Murmansk, Irkutsk, Ivánovo, Ryazán y Amur. El Ministerio de Defensa ruso aseguró que lograron frenar los ataques en todas las zonas, excepto en Murmansk e Irkutsk.
A través de nuevas imágenes satelitales de la empresa Capella Space se muestra el estado del aeródromo en Irkutsk, una región de Siberia, antes y después del ataque.




En las imágenes tomadas el 2 de junio, un día después del ataque ucraniano, se muestran los restos calcinados y desmantelados de varios aviones, tanto a lo largo de la pista de la base aérea de Belaya como en los refugios de concreto cercanos.
Las imágenes más recientes provienen de satélites de radar de apertura sintética (SAR), que emiten haces de energía hacia la Tierra y analizan los ecos de retorno para identificar detalles topográficos con gran precisión.
Según expertos, los daños visibles en estas imágenes confirman que Rusia perdió múltiples aeronaves en el ataque.
“Por los restos que se ven, al compararlos con imágenes satelitales recientes y videos de drones que circularon en Telegram y Twitter, puedo confirmar que varias aeronaves fueron destruidas”, señaló John Ford, investigador asociado del Centro de Estudios James Martin para la no Proliferación, con sede en California.
Ford agregó que, según las imágenes satelitales SAR que analizó, los restos corresponden supuestamente a dos Tu-22 Backfire destruidos, bombarderos estratégicos supersónicos de largo alcance que Rusia ha utilizado para lanzar misiles contra Ucrania.


Ford también señaló que tanto las imágenes SAR como los videos del ataque publicados en redes sociales apuntan a la destrucción o daño grave de cuatro bombarderos pesados estratégicos Tu-95.
En Kyiv, la agencia de seguridad ucraniana SBU afirmó que la operación destruyó un total de 41 aviones militares rusos.
Según un funcionario de seguridad ucraniano, ocultaron drones cargados con explosivos en los techos de cobertizos de madera, luego los transportaron en camiones hasta las cercanías de las bases aéreas.
El funcionario explicó que los techos de los cobertizos contaban con un mecanismo activado a distancia que permitía levantarlos para que los drones salieran y comenzaran el ataque.
The Independent no ha podido verificar de forma independiente estas afirmaciones.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, calificó el ataque como “absolutamente brillante” y celebró una operación que logró golpear objetivos rusos ubicados a hasta 4.300 kilómetros del frente de batalla. A través de una evaluación preliminar del ejército ucraniano, se determinó que otros 12 aviones rusos resultaron dañados tras la ofensiva del fin de semana.
“Después de analizar información adicional de diversas fuentes y verificarla, informamos que las pérdidas totales del lado ruso ascienden a 41 aeronaves militares, entre ellas bombarderos estratégicos y otros tipos de aviones de combate”, señalaron desde el SBU en una actualización.
Autoridades de la agencia agregaron que los daños rondan los 7.000 millones de dólares y que el 34 % de los portamisiles de crucero estratégicos en las principales bases aéreas de Rusia fueron alcanzados.
Traducción de Leticia Zampedri