Mariel Colón, la abogada de "El Chapo" que ahora usa su fama para lanzar su carrera musical
La abogada Mariel Colón llega en una camioneta negra con vidrios entintados hasta las puertas de una remota mansión acompañada de Emma Coronel, la esposa del famoso narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Ataviadas con trajes sastre y anteojos oscuros, ambas caminan hacia una habitación iluminada sutilmente y repleta de elegantes hombres que fuman habanos.
Todo ello en medio de trompetas que suenan.
Se trata de una escena de “La Señora”, el más reciente video musical de Colón, quien pasó varios años siendo la abogada de Guzmán durante su juicio en un tribunal de Estados Unidos. Ahora, en un momento en que la música regional mexicana se ha convertido en un fenómeno global, la mujer de 31 años busca sacar provecho de su relación con el exlíder del cártel de Sinaloa para lanzar su carrera musical con el nombre artístico de Mariel La Abogada.
“La Señora” es protagonizada —y también es un homenaje— a la esposa de Guzmán, quien fue excarcelada el año pasado y ha pasado apuros para encontrar trabajo. El video les abrió las puertas para que ambas desfilaran el fin de semana pasado en la Semana de la Moda de Milán, llamando la atención en Italia y varias otras partes del mundo.
“Creo que (mi trabajo) me abre las puertas en el sentido de que la gente por el morbo, por la curiosidad, me quieren entrevistar. Quieren entender qué pasa”, dijo Colón a The Associated Press. “Yo siempre le digo a la gente que Mariel es una cantante que se convirtió en abogada”.
Puertorriqueña e hija de un director musical, Colón creció escuchando baladas mexicanas, enamorándose de la pasión desconsolada que se inyecta en la música. Siempre quiso ser cantante, pero su familia la presionó para convertirse en abogada.
Empezó a trabajar para el equipo jurídico de Guzmán en 2018, después de graduarse de una facultad de derecho en Estados Unidos y toparse con un anuncio en Craiglist en el que buscaban una asistente jurídica para ayudar a preparar a un cliente de habla hispana para ser enjuiciado.
Fue más tarde que se enteró que trabajaría con Guzmán, quien junto con Coronel se convirtieron en clientes de tiempo completo. Lo consideró una gran oportunidad a nivel profesional y recalcó que no se intimidó fácilmente.
Alguna vez uno de los hombres más buscados del mundo, Guzmán estuvo al frente del cártel de Sinaloa durante su sangrienta guerra por el control del tráfico internacional de drogas, alcanzando un nivel de fama cinematográfico gracias a sus espectaculares fugas de prisión hasta que fue extraditado a Estados Unidos en 2017. Ahora sus hijos —conocidos como “Los Chapitos”— están enfrascados en una letal disputa de poder con otra facción del cártel, lo que ha dejado cuerpos mutilados desperdigados por distintos puntos de Culiacán, la capital del estado de Sinaloa.
“(La gente pregunta que) cómo puedo trabajar en eso, me dicen que soy parte de la mafia, que cómo puedo dormir por las noches”, declaró Colón. “No me importa lo que digan sobre mí. Duermo muy tranquila”.
Colón es una de las pocas personas que mantiene contacto regular con Guzmán. Lo visita tres veces al mes en la prisión de máxima seguridad de Colorado en la que cumple una condena a cadena perpetua. Se negó a revelar detalles sobre los casos de Guzmán, argumentando la confidencialidad entre cliente y abogado.
En un intento por construir una buena relación, Colón le canta a Guzmán y a otros de sus clientes, entre los que han estado otros narcotraficantes mexicanos y, durante breve tiempo, el magnate Jeffrey Epstein, quien se quitó la vida en 2019 mientras aguardaba un juicio por cargos de tráfico sexual.
Colón le canta a Guzmán algunos de los clásicos de la música regional mexicana, incluidos temas de Los Alegres del Barranco y Los Tucanes de Tijuana. Hasta la fecha, reconoció, él es uno de los primeros en escuchar sus nuevas canciones.
“El género que sea, cualquier cosa que saliera que me gustara, se la cantaba a él porque no tiene una radio”, comentó.
Su carrera musical comenzó hace poco más de un año, cuando estrenó su primer video, “La Abogada”, el cual muestra a Colón con un traje de color rosa, cantándole a elementos policiales desde la sala de un juzgado. Al igual que buena parte del género musical, su música abarca estilos diversos, desde banda hasta corridos.
En el video de “La Señora” se puede ver una mesa repleta con diamantes y a la esposa de Guzmán montando a un caballo que trota y caminando a un costado de una piscina.
Colón señaló que la canción se basa en la vida de Coronel y pretende enviar un mensaje de redención y segundas oportunidades. También es una manera de ofrecerle trabajo a la mujer de 35 años, uno de los elementos establecidos en su libertad condicional.
Coronel, una exreina de belleza, salió de prisión el año pasado después de cumplir una condena de tres años por tráfico de drogas y lavado de dinero en relación con el imperio de su esposo. Coronel se negó a ser entrevistada.
“Una cintura chiquita y unos ojos primorosos. Cerebro para los negocios, voz fuerte pa’ los mañosos. Nomás con el chaparrito cambia a modo cariñoso”, canta Colón, llamando “El Chaparrito” a Guzmán, el significado de su sobrenombre “El Chapo”.
El ascenso musical de Colón coincide con el auge de la música mexicana, la cual ha crecido un 400% a nivel mundial en los últimos cinco años en la plataforma de streaming Spotify. En 2023, el mexicano Peso Pluma superó a Taylor Swift en el número de reproducciones en YouTube, convirtiéndose en el cantante que más tiene.
Si bien los corridos han dominado la escena musical mexicana durante más de un siglo, artistas jóvenes han logrado llenar grandes estadios dándole un giro, mezclando baladas clásicas con tonos electrónicos para crear los llamados corridos tumbados.
Pero también están en medio de un viejo debate: ¿Son el reflejo de la realidad a la que se enfrentan muchos de los mexicanos? ¿O glorifican la narcoviolencia que envuelve al país desde hace tiempo?
La narcocultura ha sido parte de los corridos desde hace tiempo, y muchos cantantes han idealizado a los narcotraficantes, haciéndolos ver como “una figura aspiracional que va en contra de un sistema no establecido”, indicó Rafael Saldívar, investigador en la Universidad Autónoma de Baja California.
“Son expresiones de la cultura que hablan de realidades que se viven en el país”, añadió. Pero de alguna forma “se está glorificando a estos delincuentes y, al hacerlo, en algún sentido, se podría pensar en que se está fomentando este estilo de vida”.
Un ejemplo clásico es el caso del rey de los corridos, Chalino Sánchez, quien usó la violencia que lo rodeaba en el estado de Sinalo para escribir canciones al mismo tiempo que denunciaba a la “pandilla de Sinaloa” por torturar y matar a inocentes. Murió baleado al terminar una presentación en Culiacán en 1992.
El año pasado, Peso Pluma —quien rinde homenaje a Guzmán en algunas canciones— se vio obligado a cancelar una presentación en Tijuana después de que recibió amenazas de un grupo rival al cártel de Sinaloa.
Poco después, Tijuana prohibió las baladas que hacían apología del narcotráfico para proteger “los ojos y oídos” de los jóvenes en un intento por contener la violencia. Las autoridades locales en los estados del norte de México habían prohibido previamente la interpretación de narcocorridos.
Colón, quien no ha llegado al grado de glorificar las armas o las drogas, no tardó en defender los narcocorridos.
“Hay una razón por la que Netflix produjo el programa de ‘Narcos’; es porque hay un público para ello. Es intrigante para el público”, declaró. “Eso no significa que aplauden o celebran lo que hizo esta persona, sino sí hay una especie de admiración hacia esta persona o su vida. No todo es violencia. Estas personas tienen corazón, tienen familias”.
Aunque Colón planea lanzar su primer album en diciembre, Coronel le ha sacado provecho a “La Señora” para lanzar su carrera de modelo e influencer en redes sociales.
April Black Diamond, la diseñadora que le pidió a Coronel y a Colón que desfilaran en un evento en el marco de la Semana de la Moda de MIlán, dijo que que su decisión generó “conmoción”.
“Le gente evoluciona. Mi plataforma no es acerca de juzgar a las personas, sino de mostrar las distintas dimensiones de las mujeres, su fortaleza y su resiliencia”, escribió en un comunicado. Al día siguiente, las imágenes de Coronel ataviada en una de las creaciones de la diseñadora aparecieron en una valla publicitaria en Times Square, en la ciudad de Nueva York.
La Cámara Nacional de la Industria de la Moda de Italia emitió el miércoles un comunicado de prensa “urgente” en el que indicó que el desfile no formaba parte de los eventos oficiales de la semana de la moda y que las marcas debían apegarse a su código de ética.
En tanto, el video de Colón y Coronel sigue popularizándose y ya acumula unas 750.000 vistas en YouTube.