Madeleine McCann: lo que sabemos sobre su búsqueda en una granja abandonada de Portugal
Mientras la policía busca a la niña británica Madeleine McCann, desaparecida en 2007 en una localidad turística de Portugal, se agota el tiempo para encontrar pruebas que conecten el caso con el único sospechoso. Amy-Clare Martin, corresponsal de ‘The Independent’, reporta sobre los últimos esfuerzos de búsqueda
Con picos en el suelo endurecido y retirando montones de rocas y escombros, una docena de agentes de policía comenzó a trabajar el martes en una propiedad abandonada, en una localidad de Portugal, a temperaturas que alcanzaron los 20 ºC.
Reunidos en una remota zona de matorrales en lo alto de un acantilado, a pocos kilómetros del centro turístico portugués en el que desapareció Madeleine McCann hace 18 años, un equipo excavó en una granja abandonada bajo la atenta mirada de los periodistas cercanos.
Otros agentes limpiaron la maleza y los escombros alrededor de los edificios cercanos, mientras que un equipo de bomberos bombeó agua de un pozo en desuso antes de ser vistos utilizando un cabrestante para revisar el lugar.
Casi dos décadas después de que Madeleine desapareciera en la localidad de Praia da Luz, Portugal, sin dejar rastro, es aquí, en la árida campiña, donde la policía espera encontrar por fin respuestas al misterio de lo que le ocurrió a la niña, que entonces tenía tres años.
Al parecer, los investigadores han actuado siguiendo un chivatazo y esperan encontrar rastros de su cuerpo o de su ropa.

Se dijo que utilizarían un radar de penetración terrestre para ayudar a limitar el rango de la búsqueda, pero el martes se vio a los equipos utilizando palas, picos, motosierras y una bomba para vaciar el pozo mientras luchaban contra los escombros y la densa vegetación en busca de pistas.
Los últimos esfuerzos se producen mientras la policía alemana se enfrenta a una carrera contrarreloj para encontrar pruebas concretas que conecten la desaparición de la niña con el único sospechoso que se tiene hasta ahora.
El ciudadano alemán Christian Brueckner (47) está siendo investigado por la desaparición y asesinato de la niña británica en 2007, aunque niega cualquier implicación. Está previsto que salga de prisión en septiembre, al finalizar su condena de siete años por la violación de una estadounidense de 72 años en Praia da Luz en 2005.

Los padres de Madeleine, que no han hecho comentarios sobre las últimas búsquedas, prometieron el mes pasado que “[removerían] cielo y tierra” en su lucha por obtener respuestas al conmemorarse el 18º aniversario de su desaparición y el que debería haber sido su 22º cumpleaños.
El martes, los nuevos esfuerzos se centraron en la granja abandonada y otros edificios en ruinas de la zona rural de matorrales situada junto a un pintoresco sendero costero que se extiende entre las zonas de Lagos y Atalaia, cerca de una casa de campo donde solía vivir Brueckner.
“Tras el juicio de Brueckner el año pasado, alguien se puso en contacto con ellos ofreciendo teorías sobre dónde podría haberla tirado quien se llevó a Madeleine, o su ropa”, dijo una fuente de la investigación a The Sun.

“Hablaron a la policía de las trincheras que se cavaron en Praia en el momento de la desaparición de Madeleine, y de la casa donde había vivido Brueckner en las afueras del pueblo”, continuó la fuente.
Unos 30 agentes podrían participar en registros de hasta 21 lugares durante los próximos tres días.
El martes, se acordonaron los rastros hallados en el matorral, densamente poblado de vegetación, y se impidió el acceso de los periodistas a los múltiples puntos de búsqueda.

Alrededor de una docena de agentes se concentraron en un edificio abandonado donde se estaba excavando, mientras otro miembro del equipo de búsqueda despejaba un montón de escombros y grandes rocas.
Otros utilizaban motoguadañas y motosierras para limpiar la maleza y los escombros que rodeaban los edificios cubiertos de maleza.
En octubre del año pasado, Brueckner fue absuelto por un tribunal alemán de delitos sexuales no relacionados presuntamente cometidos en Portugal entre 2000 y 2017.
Los fiscales habían argumentado que debía recibir una condena de 15 años y prisión preventiva, pero un juez dictaminó que no había pruebas suficientes en el caso.
En abril, altos funcionarios del Reino Unido aprobaron una financiación adicional de más de 135.000 dólares para los detectives de la Policía Metropolitana de Londres que investigan la desaparición de Madeleine.
Un vocero de la Policía Metropolitana dijo que están al corriente la actual operación, pero que no habrá agentes británicos presentes.

La última vez que investigadores alemanes y agentes portugueses llevaron a cabo registros en el país fue en 2023, cerca del embalse de Barragem do Arade, a unos 50 km de Praia da Luz.
Brueckner, que pasó un tiempo en la zona entre 2000 y 2017, tenía fotografías y videos en los que se le veía cerca del embalse.
Ya había sido registrada en 2008, cuando el abogado portugués Marcos Aragao Correia pagó a buzos especializados para que la inspeccionaran tras afirmar haber recibido reportes de informantes de que el cuerpo de Madeleine se encontraba allí.

Más tarde, la policía británica obtuvo permiso para examinar los matorrales cercanos al lugar donde desapareció Madeleine en 2014.
El mes pasado, la familia de Madeleine conmemoró el 18º aniversario de su desaparición, describiéndola como “hermosa y única” de cara al que hubiera sido su 22° cumpleaños.
Un comunicado de sus padres, Kate y Gerry McCann, que son de la localidad de Rothley, en el condado británico de Leicestershire, rezaba: “Los años parecen pasar aún más deprisa y, aunque no tenemos noticias significativas que compartir, nuestra determinación de 'remover cielo y tierra' para encontrarla sigue inquebrantable. Haremos todo lo posible por lograrlo”.
Traducción de Sara Pignatiello