La policía francesa detiene a un hombre que mató a una persona e hirió a dos en una calle
La policía francesa detuvo a un hombre que mató a un turista alemán e hirió a otras dos personas en París el sábado por la noche, según dijo el ministro francés del Interior.
La policía redujo al hombre, un ciudadano galo de 25 años que había pasado cuatro años en prisión por planear un ataque violento. Tras su detención expresó su angustia por las muertes de musulmanes, especialmente en Afganistán y territorios palestinos, y afirmó que Francia era cómplice, indicó el ministro francés del Interior, Gerald Darmanin. El agresor habría exclamado “Allahu Akbar” ("Dios es grande" en árabe), añadió Darmanin.
“Esta persona estaba dispuesta a matar a otros”, dijo el ministro a la prensa.
La fiscalía antiterrorista confirmó que había abierto una investigación.
El atacante, que no fue identificado por su nombre, salió de prisión en 2020 después de cuatro años y estaba bajo vigilancia y en tratamiento psiquiátrico, indicó el ministro, que hizo una breve descripción del agresor, nacido en Neuilly-Sur-Seine, un suburbio de París. Hasta hace poco vivía con sus padres en la región de Essonne, en el sur de París.
El ataque se produjo en el distrito 15to de la capital francesa, donde el agresor asaltó a una pareja alemana que pasaba por la calle y mató al hombre, que no fue identificado. Después cruzó a la margen derecha del Sena y empleó un martillo para atacar a los dos heridos. En un primer momento no se conocían detalles sobre las víctimas.
El hombre fue detenido por la policía, que le disparó dos veces con una pistola eléctrica en el estómago, señaló el ministro, que elogió a los agentes por su rápida reacción y añadió que de lo contrario “sin duda habría habido otros muertos”.
Francia está bajo alerta agravada de terrorismo desde el asesinado en octubre de un maestro en la ciudad norteña de Arras a manos de un exalumno originario de Ingusetia, en el Cáucaso ruso, y sospechoso de radicalización islámica. Ese ataque ocurrió tres años después de la muerte de otro profesor a las afueras de París, decapitado por un checheno radicalizado que después fue abatido por la policía.
El ataque del sábado por la noche incrementó el temor en la capital francesa, aún marcada por los ataques islamistas de 2015 contra cafeterías y una sala de conciertos, en los que murieron 130 personas.
“No cederemos nada ante el terrorismo. nunca”, afirmó la primera ministra, Elisabeth Borne, en X, antes conocido como Twitter, donde también expresó sus condolencias con las víctimas y sus familias.