Bolivia: Compañía de Jesús pide perdón tras denuncia abuso

La Compañía de Jesús pidió perdón el martes y anunció una investigación especializada sobre el presunto abuso de varios menores en Bolivia cometido por un cura español ya fallecido.

“Les pedimos perdón por el dolor causado”, dijo en conferencia de prensa el padre Bernardo Mercado, provincial de esa orden religiosa católica, luego de anunciar una investigación que busca “crear una esperanza de justicia para las víctimas... cuya situación nos ha avergonzado y causa indignación”.

El fin de semana el diario español El País dio a conocer el caso del jesuita Alfonso Pedrajas Moreno, fallecido en Bolivia en 2009. El medio publicó un diario íntimo, al que tuvo acceso, en el que el sacerdote reconoció el abuso de al menos 85 menores durante varios años.

Las autoridades bolivianas no han precisado la cifra de víctimas ni las fechas en las que habrían sucedido los abusos y han señalado que todo es parte de la investigación.

Pero en un comunicado la Compañía de Jesús reconoció que investiga dos casos: uno que concluyó en abril y en el que encontró “verosimilitud del hecho denunciado” y otro que inició el mismo mes y que aún se encuentra en curso.

Mercado también aseguró que después de las denuncias se ha decidido “suspender de sus actividades pastorales y otras responsabilidades institucionales a los jesuitas que fueron provinciales de la época de la que datan los abusos” y que fueron los superiores de Pedrajas Moreno.

Tras conocerse el caso el procurador general, Wilfredo Chávez, abrió una investigación y anticipó que pediría a España, a través de la vía consular, lo antecedentes del cura acusado.

Audalia Zurita, abogada de la Compañía de Jesús, informó en la misma rueda de prensa que han solicitado al periódico español una copia del diario y que la información que recaben en su investigación se compartirá con la Procuraduría General.

En 2020 los obispos bolivianos crearon una Comisión Nacional Interdisciplinaria para que toda persona que sea víctima de cualquier tipo de abuso pueda acudir a esa instancia.

En la nación andina ha habido varias denuncias contra sacerdotes por pederastia, pero pocos casos se han investigado y han llegado a la justicia. En 2015 un cura rural fue condenado a 15 años de cárcel por el abuso de 12 menores y poco tiempo después se suicidó en prisión. En 2009 un sacerdote fue condenado a 22 años por delitos similares.