Pakistán: Arrestan a 12 personas ligadas a ataque que mató a 5 trabajadores chinos
La policía antiterrorista paquistaní arrestó en múltiples redadas al menos a 12 sospechosos en relación con el atentado suicida con bomba de la semana pasada que mató a cinco trabajadores chinos y a su conductor paquistaní en el volátil noroeste del país, informaron funcionarios el lunes.
Los arrestados no estuvieron involucrados directamente en el ataque, pero ayudaron a orquestar el atentado del martes contra los trabajadores chinos, de acuerdo con tres policías y funcionarios de seguridad. Señalaron que algunos de ellos tenían vínculos con militantes paquistaníes y agregaron que los sospechosos siguen siendo interrogados al tiempo que se llevan a cabo otras redadas.
Los funcionarios hablaron bajo condición de anonimato al no estar autorizados a hablar oficialmente con los medios. Según los funcionarios, las autoridades creen que algunos de los sospechosos habían transportado un automóvil cargado de explosivos a Shangla, un distrito en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, donde un atacante suicida lo estrelló contra otro vehículo, matando a los trabajadores chinos.
Los cadáveres de los cinco ciudadanos chinos fueron trasladados en avión durante la noche desde una base aérea en la ciudad guarnición de Rawalpindi a Beijing, detallaron funcionarios paquistaníes y medios estatales.
El embajador chino Jiang Zaidong estaba presente en la base aérea de Noor Khan cuando los cadáveres fueron llevados allí el domingo por la noche. Zaidong envió su más sentido pésame a las familias de las víctimas. Un ministro del gabinete paquistaní, Salik Hussain, acompañó los cuerpos a China.
Los chinos asesinados se dirigían hacia el mayor proyecto hidroeléctrico de Pakistán, la presa Dasu, donde trabajaban, cuando su vehículo fue atacado.
El primer ministro Shehbaz Sharif visitó la presa Dasu el lunes y se reunió con empleados chinos para garantizarles la seguridad. Sharif dijo que los responsables del ataque recibirán un “castigo ejemplar” y añadió que el ataque fue un intento de dañar los lazos entre Pakistán y China.
Investigadores chinos y paquistaníes llevan a cabo investigaciones separadas sobre el ataque, que generó la condena nacional. China también ha pedido a Pakistán que garantice la protección de los ciudadanos chinos que trabajan en varias partes de Pakistán en proyectos en el Corredor Económico China-Pakistán.
Las autoridades afirman que las víctimas del ataque se dirigían al sitio del proyecto en medio de estrictas medidas de seguridad.
Otros chinos que trabajan en proyectos relacionados con CPEC han sufrido ataques similares en los últimos años.
En julio de 2021, al menos 13 personas —entre ellas nueve ciudadanos chinos— murieron cuando un atacante suicida detonó explosivos en su vehículo cerca de un autobús que transportaba ingenieros y trabajadores chinos y paquistaníes, lo que llevó a las empresas chinas a suspender operaciones temporalmente.
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El periodista de The Associated Press Munir Ahmed contribuyó a este despacho desde Islamabad.