Informe: Puerta del aula de Uvalde pudo haber estado abierta, aunque oficiales esperaron la llave 77 minutos
Las imágenes de vigilancia muestran que los policías ni siquiera intentaron abrir la puerta del salón de clases donde Salvador Ramos estaba escondido con sus víctimas
La puerta del salón de clases donde el pistolero de Uvalde, Salvador Ramos, realizó su masacre pudo haber estado abierta todo el tiempo mientras los policías esperaron 77 minutos por una llave, según un informe que ha causado revuelo.
Las imágenes de vigilancia del interior de la escuela primaria Robb muestran que los agentes de policía que respondieron al tiroteo masivo del 24 de mayo ni siquiera intentaron abrir la puerta de las dos aulas conectadas donde el pistolero se escondió con sus víctimas, dijo una fuente policial al San Antonio Express-News.
La fuente dijo que los investigadores pudieron haber asumido que la puerta se cerró automáticamente, pero esa evidencia ahora sugiere que estuvo abierta durante la espera de 77 minutos que ahora se cree que costó vidas.
Las puertas de las aulas de la escuela primaria están diseñadas para bloquearse automáticamente cuando se cierran, lo que significa que solo se puede ingresar con una llave.
Sin embargo, los investigadores creen que hubo una falla en el sistema ese día.
Fue esta falla lo que ahora se cree que permitió al pistolero ingresar al edificio en primer lugar, dijo la fuente.
Las imágenes de vigilancia muestran que el hombre armado de 18 años ingresó a la Escuela Primaria Robb a través de una puerta exterior que había sido cerrada por una maestra pero que no se cerró automáticamente.
Anteriormente, los funcionarios habían acusado falsamente a la maestra de no cerrar la puerta.
Ramos logró entonces abrir también la puerta de una de las dos aulas contiguas, adonde entró y abrió fuego.
Dos minutos después de haber entrado, el pistolero volvió a salir brevemente de las aulas.
Fue visto en imágenes en el pasillo, antes de volver a entrar por la puerta del salón de clases, dijo la fuente.
Ramos no utilizó llave para entrar y se afirma que no habría podido cerrar la puerta desde dentro.
Los investigadores ahora están investigando si la puerta del salón de clases estuvo abierta durante todo el asedio.
Incluso si la puerta estaba cerrada con llave, la fuente dijo que los agentes de la ley tuvieron acceso a una herramienta similar a una palanca todo el tiempo, la cual podrían haber usado para forzar la entrada.
El informe condenatorio se produce después de que los funcionarios culparan previamente de la respuesta tardía a que no pudieron pasar por la puerta cerrada y tuvieron que esperar una llave para poder ingresar.
El jefe de policía del Distrito Escolar de Uvalde, Pete Arredondo, quien estuvo a cargo ese día y ha sido criticado por su respuesta al tiroteo masivo, rompió su silencio en una entrevista para The Texas Tribune la semana pasada, en la que afirmó que el salón de clases estaba cerrado y que él pasó gran parte del tiempo tratando de encontrar las llaves adecuadas para entrar en el salón.
Dijo que había pedido las llaves del salón y un custodio apareció con un llavero grande que contenía docenas de llaves que él trató de usar para entrar.
Sin embargo, la fuente dijo que el jefe de policía en realidad estaba probando esas llaves en otros salones de clases para encontrar la llave maestra, y no en el salón de clases donde el pistolero estaba escondido con sus víctimas.
En total, los agentes del orden esperaron 77 minutos desde el momento en que comenzó el tiroteo dentro de la escuela a las 11:33 am antes de que una unidad táctica de la Patrulla Fronteriza irrumpiera en el aula y matara a Ramos a tiros a las 12:50 pm.
Durante ese tiempo, los estudiantes aterrorizados llamaron al 911 desde el interior del salón al menos siete veces mientras los padres desesperados afuera intentaban ingresar al edificio ellos mismos después de enojarse con la demora de la policía.
El lapso de tiempo significativo bien puede haber costado vidas, ya que se supo que más de una decena de los 33 niños y tres maestros atrapados dentro de las dos aulas contiguas todavía estaban vivos durante ese tiempo.
Un maestro murió en una ambulancia camino al hospital, mientras que tres de los niños murieron después de llegar a los hospitales.
El representante del estado de Texas, Roland Gutiérrez, un demócrata cuyo distrito cubre a Uvalde, dijo para Express-News que si se determina que las afirmaciones sobre la puerta abierta son ciertas, entonces está claro que se perdieron vidas innecesariamente.
“Si eso es cierto, probablemente podríamos haber salvado a tres o cuatro niños más”, agregó.
“El maestro posiblemente podría haberse salvado. Sabemos que dos niños tenían heridas de bala por las que se desangraron. Sabemos que una maestra estaba viva cuando la sacaron y murió camino al hospital”.
Se han iniciado al menos tres investigaciones separadas sobre el manejo de la situación por parte de las fuerzas del orden, incluidas las de los Texas Rangers, el Departamento de Justicia de EE.UU. y un comité especial de la Legislatura de Texas.
La ciudad de Uvalde y su departamento de policía han dejado de divulgar información sobre el tiroteo al público y están intentando negar las solicitudes de registros públicos realizadas por varias organizaciones de medios, como los de las llamadas al 911 y las imágenes de las cámaras corporales.
La masacre en Uvalde se produjo solo 10 días después de que 10 personas negras fueran asesinadas a tiros por un autoproclamado supremacista blanco en una tienda de comestibles en Búfalo, Nueva York.
En ambos tiroteos, los sospechosos de 18 años utilizaron rifles semiautomáticos.
Los asesinatos recientes han reavivado los llamados a los legisladores para que endurezcan las regulaciones de armas para evitar que más familias sean destrozadas por el creciente número de tiroteos masivos en la nación.
Esta semana, un grupo bipartidista de senadores dijo que habían llegado a un acuerdo sobre un paquete de medidas limitadas de seguridad de armas.
El acuerdo incluye la ampliación de las verificaciones de antecedentes para las personas de 18 a 21 años y más dinero para la seguridad escolar y los recursos de salud mental.
Sin embargo, no incluye la prohibición de las armas de asalto que muchos piden, después de que se usaran rifles de alta capacidad en los ataques recientes para matar a varias personas.