La mayoría apoyan la prohibición de los celulares en las escuelas

Siete de cada diez estadounidenses apoyan la prohibición de los celulares en las escuelas, según una nueva encuesta.

Ahora que Texas se dispone a votar sobre una prohibición a nivel estatal, el debate sobre el uso de teléfonos móviles en las escuelas se está calentando: el 71 % está a favor de alguna forma de restricción y solo el 29 % se opone.

El 54 % apoya la prohibición en las escuelas primarias. El apoyo disminuye ligeramente a medida que los estudiantes crecen: el 49 % respalda la prohibición en las escuelas secundarias y el 45 % la apoya en las escuelas preparatorias.

La principal razón por la que el 78 % de los encuestados quieren que los teléfonos móviles se eliminen del aula es su potencial para distraer a los estudiantes y afectar negativamente a la educación. Otro factor importante es la preocupación de que los niños pasen demasiado tiempo con los dispositivos, con lo que el 72 % estuvo de acuerdo.

El acoso cibernético también es una preocupación importante para el 47 % que cree que una prohibición podría ayudar a reducirlo, mientras que el 45% se preocupa por el uso de la inteligencia artificial para hacer trampa en los exámenes.

Sin embargo, no todo el mundo piensa lo mismo. La principal razón para oponerse a una prohibición es la creencia de que los padres deberían poder comunicarse con sus hijos en todo momento.

Las generaciones más jóvenes también son menos propensas a apoyar las restricciones, ya que el 41 % de la generación Z se opone a una prohibición en comparación con solo el 26 % de los baby boomers.

A pesar de las diferentes opiniones, la mayoría de los estadounidenses están de acuerdo en que el uso irrestricto del teléfono en las escuelas no es lo ideal.

Solo el 8 % de los encuestados creen que los niños deberían tener acceso completo a sus teléfonos durante la jornada escolar. El compromiso más popular es permitir el uso del teléfono solo durante el almuerzo, los recreos y los períodos libres, una solución respaldada por el 56 % de los encuestados. Otro 11 % cree que los teléfonos solo deben usarse con fines educativos.

Curiosamente, los padres con niños que actualmente asisten a la escuela eran menos propensos a apoyar una prohibición que afectaría a sus hijos. Entre los padres de la escuela primaria, solo el 40 % apoyó una prohibición, en comparación con el 54 % del grupo general. Similarmente, los padres de la escuela secundaria brindaron menos apoyo (39 % frente al 49 % de todos los encuestados) y los padres de la escuela secundaria mostraron un apoyo aún menor, con un 34 % frente al 45 % general.

La encuesta fue realizada por Talker Research en febrero, con una muestra de 2.000 estadounidenses.