EEUU: Grupos progresistas se unen para contrarrestar campaña de grupos proisraelíes
Más de 20 grupos progresistas se están uniendo para contrarrestar los intentos de grupos proisraelíes de retar a políticos liberales que han criticado la ofensiva israelí en Gaza.
La coalición, llamada Reject AIPAC, incluye organizaciones judías pacifistas y grupos árabes y musulmanes que se han estado organizando en cantidades récord desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamás en octubre.
Se trata de una campaña para contrarrestar las gestiones de grupos proisraelíes como la American Israel Public Affairs Committee (Comité Israelí-Estadounidense de Asuntos Públicos, conocido como AIPAC), que han prometido invertir decenas de millones de dólares para tratar de derrotar a legisladores progresistas en primarias y en las elecciones generales de este año. Esas gestiones han puesto en duda los resultados en distritos que una vez eran sólidamente demócratas.
“Se trata de unos cuantos políticos progresistas negros o morenos en el cargo que son amenazados con una campaña de 100 millones de dólares, y generalmente la clase dirigente demócrata se levanta en armas cada vez que alguien presenta a un candidato para desafiarlo en las primarias”, dijo Usamah Andrabi, director de comunicaciones de Justice Democrats, uno de los grupos que forman parte de la coalición. “Pero hay menos energía cuando se trata de algunos de esos progresistas, así que nos estamos uniendo para asegurarnos de que tengan los recursos para defenderse contra AIPAC”.
La estrategia, según Andrabi, es unir a las organizaciones de base para crear un fondo de campaña que busca no sólo proteger a legisladores de los intentos de AIPAC, sino también para subrayar lo que ellos consideran es la manera en que AIPAC se ha distanciado de los valores tradicionales del Partido Demócrata.
AIPAC ha defendido su trayectoria, y el mes pasado declaró a The Associated Press que “es totalmente congruente con los valores progresistas apoyar al Estado judío” y que el grupo tiene un historial de respaldar a miembros de la Bancada Progresista en el Congreso.
Aun así, la nueva coalición buscará respaldar a miembros y candidatos propalestinos y a exhibir encuestas nacionales que muestren que la mayoría de los demócratas están alineados con sus posturas, como exigir un cese al fuego en Gaza y a condicionar la entrega de ayuda estadounidense a Israel a medida que la cifra de víctimas civiles sobre pasa los 30.000 palestinos tras apenas cinco meses de guerra.
La ofensiva israelí también ha expulsado a la mayoría de los palestinos de sus viviendas y ha empujado a una cuarta de la población al borde de la hambruna. En el ataque del 7 de octubre perpetrado por Hamás y que desató la guerra, los milicianos palestinos mataron a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomaron unos 250 rehenes.
En el Congreso, el tema de la guerra ha causado divisiones entre los demócratas, y algunos legisladores alienados con AIPAC se negaron a hablar públicamente del asunto.
Parte de la estrategia de la nueva coalición es publicitar esas grietas, al obligar a todo miembro o candidato alineado con ella a firmar una promesa de rechazar todo financiamiento por parte de grupos como AIPAC.
Esto ocurre en momentos en que AIPAC ha ido modificando su estrategia en años de recientes: De ser una organización de presión política a ayudar a elegir demócratas centristas proisraelíes. En 2022, empezó a retar a políticos demócratas por medio de primarias.