Biden promete que la ómicron no arruinará la Navidad

Mientras la variante ómicron del Sars-CoV-2 hace estragos en EE.UU., el presidente Joe Biden intentará el martes tranquilizar a los estadounidenses para que puedan reunirse con sus amigos y familiares de forma segura esta Navidad, siempre que se vacunen y lleven cubrebocas cuando viajen.

Biden se dirigirá a la nación para hablar del plan de su administración para gestionar la propagación de la ómicron, que el lunes se convirtió en la variante predominante del virus que causa el covid-19 que circula actualmente por Estados Unidos.

El lunes, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo a los periodistas que Biden no anunciaría nada parecido a los “confinamientos” que la administración Trump apoyó inicialmente en las primeras semanas de la pandemia el pasado mes de marzo.

“No se trata de un discurso sobre el confinamiento del país”, declaró Psaki. Añadió que los mensajes recientes de la administración en torno al covid-19, incluida la advertencia hecha por Biden la semana pasada de que se producirían más hospitalizaciones y muertes para quienes no estuvieran vacunados, no pretendían asustar a nadie, sino “dejar claro a la gente del país cuáles son los riesgos de no estar vacunado”.

Un alto funcionario de la Casa Blanca habló con los periodistas en una conferencia telefónica celebrada el lunes por la noche para anticipar las declaraciones de Biden: “Muchos estadounidenses tienen preguntas sobre cómo reunirse con la familia, cómo estar más seguros y si nos dirigimos hacia el confinamiento. El Presidente responderá a todas esas preguntas y expondrá las nuevas medidas que está tomando para prepararse ante el aumento de casos”.

El funcionario dijo que Biden hará hincapié en que EE.UU. cuenta actualmente con las herramientas necesarias para hacer frente a la variante ómicron, que, según los expertos, tiene varias mutaciones genéticas que le ayudan a propagarse mucho más fácilmente que otras variantes del Sars-CoV-2.

El presidente dirá a los estadounidenses que tendrán “un alto grado de protección contra la enfermedad grave” si se han vacunado contra el covid-19, y aún más si han optado por recibir una de las vacunas de refuerzo del covid-19, ampliamente disponibles.

Aunque el funcionario advirtió que habrá personas con esquema de vacunación completo que den positivo en la prueba de covid-19, “probablemente no tendrán síntomas o serán leves debido a esa fuerte protección”.

“El presidente le dirá al pueblo estadounidense que si se vacuna y sigue el proceso que todos conocemos bien, sobre todo al utilizar cubrebocas mientras viaja, debería sentirse cómodo celebrando la Navidad y las fiestas”, expresaron, y agregaron que quienes hayan decidido no vacunarse estarán “en alto riesgo de enfermarse”.

“Esta variante es altamente transmisible y los no vacunados tienen ocho veces más probabilidades de ser hospitalizados y 14 veces más probabilidades de morir a causa del covid-19”, subrayó el funcionario.

Citando el aumento de la transmisibilidad de la ómicron, el funcionario dijo que Biden esbozará las medidas que tomará la administración “para garantizar que los estados y los hospitales de todo el país tengan el personal, las camas y los suministros que necesitan para luchar contra el aumento de los casos de Ómicron entre los no vacunados”.

Biden dará pronto instrucciones al Secretario de Defensa, Lloyd Austin, para que movilice a 1.000 médicos, enfermeras, personal sanitario y otro personal militar para “desplegarlos en los hospitales sobrecargados” durante los próximos dos meses.

Seis “equipos de respuesta de emergencia” de 100 personas, compuestos por paramédicos y otro “personal clínico de emergencia”, también se están desplegando en seis estados -Michigan, Indiana, Wisconsin, Arizona, New Hampshire y Vermont- en este momento, además de los más de 300 efectivos que se han desplegado desde la aparición de la ómicron.

“Si Dios quiere, no necesitaremos a todos estos militares, pero si los necesitamos, están listos y movilizados”, manifestó el funcionario.

Además, el funcionario dijo que Biden pedirá a la Agencia Federal de Gestión de Emergencias que active el Centro de Coordinación de la Respuesta Nacional de la agencia, así como que preponga “suministros y materiales críticos” necesarios para poner en marcha más camas de hospital.

“Tenemos cientos de millones de cubrebocas de alta calidad, miles de millones de guantes y miles de ventiladores. Hemos almacenado los suministros en lugares estratégicos de EE.UU. para que, si un hospital se queda sin ellos, podamos llevarlos a los estados que los necesiten de inmediato”, señalaron.

A continuación, el funcionario dijo que Biden también anunciará la compra de 500 millones de pruebas rápidas de covid-19 que se entregarán gratuitamente a cualquier estadounidense que las desee a partir del mes que viene, así como un sitio web que los estadounidenses podrán utilizar para solicitar que se les envíen las pruebas sin coste alguno.

La administración también establecerá nuevos centros federales de pruebas en todo EE.UU. -incluido uno que se establecerá en la ciudad de Nueva York esta semana-, así como utilizará a la FEMA (Agencia Federal para el Manejo de Emergencias) para poner en marcha nuevas clínicas de vacunación emergentes y desplegará “cientos de vacunadores federales adicionales” que añadirán miles de citas de capacidad además de las citas y la capacidad que están añadiendo las farmacias en todo el país.

El funcionario declaró que “la idea fundamental” que Biden entregará al pueblo estadounidense es que deben “tomar a la ómicron en serio”, pero la nueva variante es simplemente una “causa de preocupación” y no una “causa de pánico”.

“Tenemos las herramientas, los conocimientos y la planificación para superar esto. Si cuentas con un esquema de vacunación completo, especialmente si te has puesto la vacuna de refuerzo, estás muy protegido. Así que eso es lo que el presidente de alguien pasará mañana”, señalaron.