Biden dice que revocar los mandatos de cubrebocas “probablemente sea prematuro”
Varios estados liderados por demócratas consideran revertir los mandatos de cubrebocas
El presidente Joe Biden dice que los líderes probablemente actúen de forma prematura al considerar revocar los mandatos de cubrebocas por el covid-19, ya que varios estados demócratas consideran eliminar esta estrategia de mitigación científicamente verificada.
“Eliminar los cubrebocas probablemente sea prematuro”, le comentó Biden a Lester Holt de NBC el jueves, aunque también señaló el “profundo impacto en la psique del pueblo estadounidense” que ha tenido la pandemia continua.
El jueves, Nevada eliminó su mandato de cubrebocas en interiores para la mayoría de los lugares además de las instalaciones de atención médica. Mientras tanto, estados como Connecticut, Delaware, Nueva Jersey, Oregón, Rhode Island, California, Nueva York, Illinois y Massachusetts consideran unirse a los muchos estados republicanos y del sur que abandonaron o nunca tuvieron reglas estrictas sobre el uso de cubrebocas.
“Es difícil decir si están equivocados”, agregó Biden en la entrevista. “Establecieron un límite de tiempo y supongo que tiene algo que ver con que la variante ómicron continúa cuesta abajo”.
Pero de igual modo, el presidente, así como la directora de los CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades), han insistido en que los líderes aún deberían alentar el uso de cubrebocas.
“Ahora no es el momento” de deshacerse de los cubrebocas, aseveró la directora de los CDC, Rochelle Walensky, a principios de esta semana.
La sensación de urgencia puede estar en disminución cuando se trata de mandatos de cubrebocas, pero el covid-19 apenas ha disminuido.
Lo peor del aumento de la variante ómicron parece haber pasado, pero el promedio de casos semanales en EE.UU. aún superaba los 169.000 el jueves, una cifra más alta que durante gran parte de la pandemia, incluido el periodo en que la vacuna no estaba disponible. La única vez que ha habido más casos fue durante lo peor de la reciente ola de ómicron y el pico del invierno pasado por los casos de la variante delta.
Al hablar en una reciente mesa redonda de expertos en salud pública, el Dr. Georges Benjamin, director ejecutivo de la Asociación Estadounidense de Salud Pública, comentó que la administración Biden había “comenzado muy bien” en la lucha contra la pandemia, pero “el desafío es que este virus continúa lanzándonos sus mejores golpes”, le dijo a NPR.
Los expertos elogiaron el énfasis de Biden en expandir el acceso a las vacunas, restaurar la confianza en los funcionarios de salud pública después del caos de la administración Trump y aprobar el Plan de Rescate Estadounidense de US$1,9 billones.
Aún así, el presidente no ha logrado convencer ni llegar a casi una cuarta parte de la población, en su mayoría republicanos, que no han recibido ni una sola dosis de la vacuna.
Pero otras personas han argumentado que la administración puso demasiada fe en la vacunación para salir de la pandemia y descuidó el desarrollo de estrategias como el monitoreo generalizado de enfermedades, facilitar el acceso a cubrebocas de alta calidad y pruebas de covid, además de otras estrategias de mitigación.
“Creo que puede haber habido un énfasis excesivo en la vacunación como la manera fácil de resolver esto a costa de las pruebas y otras estrategias de mitigación que podríamos haber seguido para reducir parte de la carga que hemos visto”, Seema Lakdawala, viróloga de la Universidad de Pittsburgh, agregó en la discusión de NPR.
Por supuesto, hay cosas que están fuera del alcance de Biden, como la embestida de dos fuertes variantes de coronavirus, cada una más poderosa que la anterior, así como la estructura de gobierno federal descentralizada de EE.UU., que le da al presidente poca influencia sobre las decisiones de estados, funcionarios escolares y otros impulsores de la política de salud pública en la vida cotidiana.