La cocaína bate récords en EE. UU. y el narco mexicano al que Trump le declaró la guerra aprovecha el auge
El consumo de cocaína en el oeste de EE. UU. creció 154 % desde 2019, lo que marca un aumento sin precedentes
El consumo de cocaína es ahora más popular que nunca en Estados Unidos, con un fuerte repunte en los últimos años que ha permitido al narcotraficante mexicano, señalado como principal responsable del auge, obtener enormes ganancias.
De acuerdo con datos de la empresa de pruebas toxicológicas Millennium Health, el consumo de cocaína en el oeste de EE. UU. aumentó un 154 % desde 2019. En el mismo periodo, en la costa este el incremento fue del 19 %.
Al mismo tiempo, el uso del letal fentanilo ha disminuido desde mediados de 2023, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
El gobierno de Trump prometió intensificar la ofensiva contra los cárteles e impuso duras sanciones económicas a México con el objetivo de frenar el flujo de fentanilo y otros productos ilícitos hacia Estados Unidos.

Uno de los principales objetivos ha sido el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), liderado por Nemesio Rubén “El Mencho” Oseguera Cervantes, considerado el grupo con mayor capacidad de tráfico de cocaína, heroína y metanfetaminas en México.
Fuentes familiarizadas con las operaciones del CJNG dijeron a The Wall Street Journal que en Colombia se están produciendo cantidades récord de cocaína, lo que ha incrementado el volumen en EE. UU. y reducido los precios.
Morgan Godvin, investigadora de la organización comunitaria Drug Checking Los Angeles, señaló al medio que el precio de la cocaína pura “se ha desplomado” a un promedio de entre 60 y 75 dólares por gramo, una caída de casi la mitad respecto a hace cinco años.
Oseguera Cervantes y otros cuatro líderes del cártel también enfrentan sanciones de EE. UU., que ofrece una recompensa de 15 millones de dólares por información que lleve a su captura.


Oseguera Cervantes, acusado en varias ocasiones en EE. UU. desde 2017, sigue pareciendo prácticamente intocable y rara vez abandona su escondite fuertemente vigilado en la Sierra Madre de México, según The Wall Street Journal.
Fuentes cercanas a las operaciones del CJNG dijeron al medio que quienes visitan el complejo son encapuchados durante el viaje de seis horas en automóvil por la zona, la cual está llena de minas terrestres. Los guardias armados que protegen a Oseguera Cervantes estarían equipados con lanzacohetes portátiles RPG-7 de rastreo térmico, capaces de perforar el blindaje de tanques.
Oseguera Cervantes se benefició en los últimos años del enfoque de Estados Unidos en la epidemia de fentanilo y de la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán en 2016, que generó un vacío de poder en el cártel rival de Sinaloa.

Además, la intensa campaña de Donald Trump para arrestar y deportar migrantes de Estados Unidos ha apartado a múltiples agentes federales de las operaciones de control del narcotráfico.
The Wall Street Journal informó que dos retenes de la patrulla fronteriza en Arizona, ubicados en un importante corredor de contrabando de fentanilo, quedaron sin personal después de que los agentes fueran reasignados para procesar migrantes.
Según el medio, el CJNG también se beneficia de los migrantes en el otro extremo, cobrando miles de dólares a quienes intentan llegar a EE. UU. por atravesar territorio bajo su control. De acuerdo con el Departamento del Tesoro, en los últimos años el cártel también ha operado centros de llamadas para estafar a ciudadanos mayores, logrando cientos de millones de dólares mediante fraudes con supuestos tiempos compartidos.
Traducción de Leticia Zampedri