Primera sonda lunar japonesa apunta a un blanco muy pequeño
La agencia espacial de Japón se apresta a realizar su primer alunizaje el sábado, apuntando a un blanco muy pequeño.
El Módulo de Alunizaje para Investigar la Luna (SLIM por sus siglas en inglés), una nave liviana del tamaño de un vehículo pequeño, utiliza una tecnología de “descenso preciso” que promete un control mucho mayor que en cualquier alunizaje anterior.
Mientras la mayoría de las sondas anteriores han utilizado zonas de descenso de unos 10 kilómetros (seis millas) de ancho, SLIM apunta a un blanco de apenas 100 metros (30 pies).
Es el fruto de dos décadas de trabajo sobre tecnología de precisión de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA). De tener éxito, Japón será el quinto país en efectuar un alunizaje después de Estados Unidos, Rusia, China e India.
El objetivo principal de la misión es ensayar una nueva tecnología de descenso que permitirá a la nave descender “donde nosotros queremos en lugar de donde es fácil descender”, detalló JAXA. La nave espacial buscará indicios sobre el origen de la Luna, con análisis de minerales mediante una cámara especial.
El SLIM, equipado con una almohadilla para amortiguar el impacto, pretende descender cerca del cráter Shioli, próximo a una región cubierta de roca volcánica.
El viernes, el SLIM redujo su órbita a 15 kilómetros (9,3 millas) sobre la superficie lunar, desde la cual efectuará la aproximación final al descenso, señaló JAXA. La hora prevista es 20 minutos después de la medianoche del sábado, hora de Tokio (0320 GMT).
Llamado familiarmente Francotirador Lunar, fue lanzado con un cohete Mitsubishi H2A en septiembre. Después de orbitar la Tierra, entró en órbita lunar el día de Navidad.
Japón espera que el éxito le ayude a recuperar confianza en su tecnología espacial tras una serie de fracasos. Una nave espacial diseñada por una empresa japonesa aparentemente se estrelló durante un intento de alunizaje en abril y un cohete nuevo falló en su primer intento de despegue en marzo.
El SLIM transporta dos pequeñas sondas autónomas, LEV-1 y LEV-2, que se desprenderán momentos antes del alunizaje.