Muere una mujer que asomó la cabeza por la ventana de un tren golpeada por la rama de un árbol
La investigación escuchó que la compañía de tren había realizado previamente una evaluación de riesgos de sus ventanas que se abren desde adentro. Esto se produjo tras la muerte de un pasajero en el sur de Londres en agosto de 2016 que también se había asomado por la ventana de un tren en movimiento
Una mujer murió cuando fue golpeada por la rama de un árbol, después de haber sacado la cabeza por la ventana de un tren, concluyó un jurado de investigación.
Bethan Roper sufrió heridas mortales en la cabeza mientras viajaba en el tren Great Western Railway (GWR), que viajaba a unas 75 milas por hora.
La joven de 28 años de Penarth, Gales del Sur, regresaba a casa en el tren a Gales después de un viaje de compras navideñas a Bath el 1 de diciembre de 2018.
El servicio de GWR London Paddington a Exeter utilizaba vagones equipados con ventanas que se abren desde adentro. Estas permiten a los pasajeros pasar el brazo por la ventana para usar la manija en el exterior cuando necesitan bajar al andén.
Los investigadores dijeron al Tribunal Forense de Avon que el letrero de advertencia ubicado sobre la ventana, una etiqueta amarilla con las palabras: "Precaución, no se asome por la ventana cuando el tren está en movimiento", aparentemente no fue un disuasivo suficiente para evitar que Roper se inclinara hacia afuera.
La investigación escuchó que GWR había realizado previamente una evaluación de riesgos de este tipo de ventanas, cuyo vidrio se puede correr para abajo. Esto se produjo tras la muerte de un pasajero en el sur de Londres en agosto de 2016 que también se había asomado por la ventana de un tren en movimiento.
La evaluación de riesgos de 2016 dio como resultado un plan para instalar letreros de advertencia mejorados. Deberían haberse instalado en mayo de 2018 y haber tenido un fondo rojo. Sin embargo, lamentablemente no se habían instalado cuando Roper se murió siete meses después.
Roper resultó herida de muerte cuando una rama de fresno golpeó su cabeza pocos minutos después de que el tren saliera de Bath. Una autopsia descubrió que había muerto por heridas en la cabeza.
Las pruebas de toxicología también revelaron que la joven de 28 años tenía un nivel de alcohol en la sangre de 142 mg en 100 ml de sangre, lo que indicaría que era casi el doble del límite de alcohol al conducir.
El árbol en cuestión había sido objeto de inspecciones tanto en 2009 como en 2012 por Network Rail como parte de un ciclo de cinco años para gestionar la vegetación junto a las vías.
Parecía que el árbol había estado creciendo en el terraplén, ubicado a cinco metros de la pista. Más tarde se convirtió en el hogar de dos tipos de hongos de descomposición de la madera que habían provocado la pudrición de algunas de las ramas.
La rama que golpeó y mató a Roper había caído hacia la vía del tren y descansaba sobre una valla en el terraplén.
La investigación escuchó que más inspecciones pudieron haber podido prevenir la tragedia.
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La forense principal de Avon, Maria Voisin, explicó que no haría un informe de “prevención de muertes futuras” porque se están eliminando de forma gradual los vagones Mk 3 involucrados.
Los vagones se introdujeron por primera vez en la década de 1970 y están siendo reemplazados por puertas que se abren y cierran con solo presionar un botón electrónico.
Tras cinco días de pruebas, el jurado concluyó: “Bethan murió como resultado de un incidente a bordo de un tren que viajaba de Bath a Bristol Temple Meads el 1 de diciembre de 2018.
Bethan subió al tren bajo la influencia del alcohol. A pesar de un letrero de advertencia, se asomó por una ventana que se abre desde adentro a bordo de un tren en movimiento.
"Ella fue golpeada por el tronco de un árbol, sufriendo una herida fatal en la cabeza".