Nueva junta de Cruz Roja de Venezuela hará auditoría interna en 12 meses tras intervención judicial
La nueva junta directiva de la Cruz Roja de Venezuela anunció el lunes que llamará a elecciones libres en un plazo máximo de un año, después de que se haga un profundo proceso de revisión y renovación de los procedimientos a todo nivel, de acuerdo con una orden judicial derivada de una denuncia de la Fiscalía y de un estrecho aliado del presidente Nicolás Maduro para intervenir la cúpula directiva de la organización humanitaria.
El anuncio se produjo tres días después de que el Tribunal Supremo de Justicia, controlado por el gobierno del presidente Nicolás Maduro, ordenara una restructuración en la Cruz Roja venezolana, así como el cese de manera inmediata en el ejercicio de sus cargos de su presidente, Mario Villarroel, y de los demás miembros que integraban la anterior directiva.
El Fiscal General Tarek William Saab, cercano colaborador de Maduro, indicó el pasado 28 de julio que designó a un fiscal nacional para investigar y sancionar a los responsables de presunto “acoso y maltrato” a voluntarios y trabajadores de esa institución por parte de Villarroel y miembros de su equipo.
La denuncia de Saab se produjo un día después de que el diputado Diosdado Cabello, considerado el segundo hombre más poderoso de Venezuela después de Maduro y vicepresidente del partido de gobierno, acusara al titular de la Cruz Roja Venezolana y a su equipo de “conspirar” contra el gobierno y de “actividad mafiosa” en el manejo de fondos.
En el comunicado en el que se dieron a conocer los nombres de las personalidades que aceptaron formar parte de la “junta reestructuradora ad hoc”, se indicó que solicitará el acompañamiento de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, así como del Comité Internacional de la Cruz Roja.
El comité directivo también se focalizará en “la creación de mecanismos de transparencia de sus procesos e integridad de los voluntarios”, acotó el escrito.
Su labor contará con la observancia de un grupo de representantes del cuerpo diplomático acreditado en el país”, añadió el comunicado, sin más detalles.
La Sala Constitucional del máximo tribunal se declaró el viernes pasado competente y admitió una demanda interpuesta por la Fiscalía general.
La anterior junta directiva de la Sociedad Venezolana de la Cruz Roja rechazó “categóricamente” en un comunicado las acusaciones de Cabello en contra de Villarroel, quien presidía la rama venezolana de ese organismo internacional desde 1978.
La nueva directiva, según la sentencia, debe garantizar la continuidad en el servicio que presta la organización humanitaria, el respeto a los trabajadores y voluntarios de la institución.
En su resolución, el tribunal designó como presidente de la junta ad hoc al empresario Ricardo Filippo Cussano, expresidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela, la mayor cámara de empresas del país.
Cussano también fue encargado de coordinar la designación de los restantes miembros de la junta, entre los que ahora figura el esgrimista Rubén Limardo, medallista de oro en los Juegos Olímpicos Londres 2012.
En la directiva de siete miembros, además destaca Alberto Vollmer, un acaudalado empresario dedicado a la producción de ron cuya familia tiene un vínculo con el organismo humanitario. Los terrenos donde fue edificada la sede de la Cruz Roja, que llegó a Venezuela en 1895, fueron donados por la familia Vollmer.
El resto de la directiva la integra la médica ginecobstetra, Griswill Fonseca; el cirujano Juan Simón Muñoz; la doctora en bioquímica María Fátima Garcés, recientemente electa vicerrectora académica de la Universidad Central de Venezuela (UCV), la mayor y más antigua del país. Además de Jhoanna Pantoja, una estudiante de enfermería y voluntaria de la Cruz Roja.
La sentencia, que tuvo como ponente a la magistrada Tania D’Amelio, dispuso que Cussano colabore con el Ministerio Público en la investigación y consecución del proceso penal que se lleva adelante contra el Comité Directivo saliente, así como en cualquier otro proceso conexo que así lo requiera.