Padre de Debanhi Escobar asegura que ha recibido amenazas de muerte
Mario Escobar denunció públicamente que ha recibido llamadas intimidantes por querer encontrar la verdad sobre la muerte de su hija. El padre ha dicho que está dispuesto a todo, aunque lo manden a la tumba donde descansa Debanhi
Este artículo fue publicado originalmente el 29 de abril de 2022
La noche del pasado 22 de abril, el cuerpo en estado de descomposición de Debanhi Susana Escobar Bazaldúa fue hallado en la cisterna subterránea del Motel Nueva Castilla, en el municipio de Escobedo, en el estado mexicano de Nuevo León, a una cuadra y media al sur de la empresa Alcosa Transportes Internacionales, uno de los lugares donde fue vista con vida por última vez.
La inquietante fotografía en la que se apreciaba a la joven abandonada al costado de una carretera acaparó la atención internacional. Una semana antes de desaparecer, Debanhi se unió a miles de mujeres en la marcha contra la violencia de género en su estado natal, en el marco del Día Internacional de la Mujer.
Después de que sus padres reportaran la desaparición a través de su cuenta de Instagram, inició un largo camino de dolor, controversias y muchas preguntas para la familia de la estudiante de Derecho que se extravió en la carretera que va de Monterrey a Nuevo Laredo, una ciudad al norte del estado.
El trayecto no ha sido fácil para los padres de la joven, sobre todo para el señor Mario Escobar, quien recientemente denunció que ha recibido amenazas de muerte por querer encontrar la verdad sobre el fallecimiento de su hija. En entrevista con la prensa mexicana, el padre declaró: “No sé quién sea, pero no tengo miedo. Gracias a Dios, en la bóveda [tumba] que le hice a mi hija, hay tres lugares; y si necesito llegar a ese lugar para encontrar la verdad, voy a llegar. No me interesa, el cajón ya está ahí”.
Cuando los medios de comunicación cuestionaron el contenido de esas llamadas telefónicas, Escobar omitió los detalles y se limitó a decir: “Tengo muchas llamadas”.
Las autoridades aseguraron que Debanhi estuvo sumergida en agua durante casi dos semanas, por lo que su cuerpo quedó irreconocible. Fue identificada por un collar de crucifijo y la ropa que llevaba puesta. El señor Mario refutó esta versión y, en entrevista exclusiva con Independent en Español, reveló que a su hija “la mataron y la sembraron”.
“Contusión profunda de cráneo”
El pasado 28 de abril, la Fiscalía de Nuevo León brindó una cronología de los hechos y mostró videos inéditos de la joven que, según detallan las indagatorias hasta el momento, no era perseguida por otra persona. Durante todo su recorrido, Debanhi únicamente intentó pedir auxilio, detallaron las autoridades estatales.
De acuerdo con los investigadores y peritos forenses, la joven de 18 años acudió a tres reuniones sociales con un grupo de amigas y, aparentemente, tras una discusión, ella fue trasladada por un servicio de taxi particular hacia su casa, pero nunca llegó debido a que ella descendió del vehículo, según el testimonio del conductor identificado como Juan David Cuéllar.
Según la versión oficial de la Fiscalía de Nuevo León, Debanhi intentó acceder sin éxito a la empresa Alcosa Transportes Internacionales, ubicada a unos metros de donde se festejó la última fiesta a la que acudió la joven, en Las Quintas cerca de la FGR (Fiscalía General de la República) en el municipio de Escobedo. Un segundo intento se registró cuando la estudiante acudió al Motel Nueva Castilla y ahí, diversas cámaras de seguridad captaron su recorrido y, minutos más tarde, desapareció.
Finalmente, la noche del 22 de abril, el cuerpo de Debanhi fue hallado en una de las tres cisternas subterráneas del Motel Nueva Castilla, dos de ellas abiertas. Según el Departamento de Criminalística y Servicios Periciales de la entidad, cada fosa mide 90 por 98 centímetros con una profundidad de 4,43 metros y un nivel de agua de 90 centímetros. La versión de las autoridades es que Debanhi cayó “accidentalmente” a la cisterna y ahí murió.
La causa del fallecimiento, según las autoridades, fue una “contusión profunda de cráneo”. De acuerdo con la autopsia, señaló una fase enfisematosa de putrefacción del cuerpo, es decir, que su fecha de muerte pudo haber sido de cinco días a dos semanas.
A pesar de los detalles brindados y la aparente conclusión, el padre de Debanhi contrató a un perito forense de forma independiente para esclarecer el caso. En los próximos días, se esperan nuevos hallazgos tras la comparativa de resultados del nuevo estudio y las indagatorias de la Fiscalía del estado.
Desde entonces, una tercera autopsia concluyó que Escobar murió por asfixia debido a la “obstrucción de los orificios respiratorios”.