Científicos diseñan mosquitos que no pueden transmitir la malaria
Los investigadores recolectarán parásitos de niños en Tanzania para ver si el descubrimiento funciona en el mundo real
Científicos han diseñado mosquitos que no pueden transmitir la malaria a los humanos, dicen que su trabajo tiene la capacidad de eliminar la enfermedad.
Los investigadores del Imperial College de Londres modificaron genéticamente los insectos para que se ralentice el crecimiento de los parásitos en sus intestinos. Estos parásitos son los que causan la malaria.
Significaba que era poco probable que los parásitos alcancen las glándulas salivales de los mosquitos y se transmitan mediante una picadura antes de que los insectos mueran.
Hasta ahora, dicen los científicos, se ha demostrado que la técnica reduce bastante la posibilidad de propagación de la malaria en un laboratorio, pero si se demuestra que es segura y efectiva en el mundo real, podría ofrecer una nueva y poderosa herramienta para ayudar a eliminar la malaria.
El estudio, financiado por la Fundación Bill y Melinda Gates y publicado en Science Advances, requirió que el equipo estableciera un centro en Tanzania para generar mosquitos genéticamente modificados y realizar pruebas.
El trabajo consiste en recolectar parásitos de estudiantes locales infectados.
La malaria es una de las enfermedades más devastadoras del mundo y pone en riesgo a cerca de la mitad de la población mundial. El año pasado, infectó a 241 millones de personas en el África subsahariana y mató a 627.000, en su mayoría niños menores de cinco años.
El coautor del estudio, Tibebu Habtewold, del Imperial College, declaró: “Desde 2015, el progreso en la lucha contra la malaria se ha estancado”.
“Los mosquitos y los parásitos que transportan se vuelven resistentes a las intervenciones disponibles, como insecticidas y tratamientos, y la financiación se ha estancado. Necesitamos desarrollar nuevas herramientas innovadoras”.
El coautor principal, Nikolai Windbichler, dijo: “Ahora nuestro objetivo es probar si esta modificación puede bloquear la transmisión de la malaria no solo mediante parásitos que hemos criado en el laboratorio, sino también de parásitos que han infectado a humanos”.
“Si esto resulta ser cierto, estaremos listos para llevar esto a pruebas de campo dentro de los próximos dos o tres años”.