¿Por qué hay conflicto entre Residente y J. Balvin? Lo que sabemos del enfrentamiento

La semana pasada, las redes comentaron la nueva canción que Residente hizo con Bizarrap, cuya letra está dedicada a J. Balvin y a otro intérprete del género urbano, a quienes considera falsos y faltos de talento.

El tema de 8 minutos de duración no escatima en insultos y descalificaciones, todos bien rimados, en oraciones que aseguran que el talento del puertorriqueño viene de las calles y a las calles se debe, a diferencia del colombiano que, dice, necesita hasta 20 escritores para una sola de sus canciones.

“Tú y yo no somos iguales, yo no creo en las estrellas de las plataformas digitales, ni en tus billboards de cremita de pastel; ni en tus historias de Instagram de Dolce & Gabanna y Cartier”, dice el cantante sobre J. Balvin, que tiene 51,8 millones de seguidores en su cuenta de Instagram.

“Pa’ dos minutos de canción tienen 20 escritores, hasta los manejadores son compositores. Quinientos dólares por un boleto, señores; por brincar como un p&%$*jo vestido de colores. El autotune y el playback activado, estos bobos cantan hasta con el micrófono apagao”, continúa.

El conflicto entre ambos artistas comenzó cuando J. Balvin hizo un llamado a boicotear los Latin Grammy en que Rubén Blades iba a ser homenajeado, a lo que René respondió que no era correcto pedir que no asistiera la comunidad latina a la entrega de premios, pues el homenaje a uno de ellos era producto de todo lo que habían conquistado.

En esa misma respuesta, René Pérez Joglar, verdadero nombre de Residente, le dijo a Balvin que su música “es como si fuera un carrito de hot dog, que a mucha gente le puede gustar o a casi todo el mundo. Pero cuando esa gente quiere comer bien, se van a un restaurante y ese restaurante es el que se gana las estrellas Michelin”.

A pesar de que, según Residente, ambos artistas llegaron a un acuerdo para no generar más polémica, el colombiano sacó poco después una línea de productos y ropa con diseños de hot dog, para generar ganancias a costa del desencuentro.

Las cosas parecían haber quedado ahí, sin embargo, hace unas semanas el exvocalista de Calle 13 aseguró que Balvin había amenazado con demandar a su sello discográfico si lanzaba un tema en el que se refiriera a él en “un par de líneas”. Residente pidió a la gente decidir si sacaba la canción o no.

“El pueblo luchando, los están matando y el tipo sube fotos de Ghandi rezando (...) se hace el espiritual, usando la salud mental pa’ vender un documental”, dice el rap haciendo alusión a una serie en la que participó con deportistas de élite de la NBA y la NFL, y en la que habla de cómo la cuarentena lo llevó a hacer cosas para “hacerse feliz”, tales como sky diving y beber todos los domingos.

Ese aire superficial y su forma de vida, en la que no hay una agenda visible para ayudar a las personas que tienen menos oportunidades, es otra de las críticas que hace Residente en su canción y en diferentes vídeos que ha subido. En la sesión de rap asegura que José Álvaro Osorio, verdadero nombre de Balvin, no es consciente de sus privilegios y se ha convertido en un títere de la industria musical y en una persona racista, alejado de sus raíces colombianas.

“Un blanquito que perdió el camino, todo divino aceptando su premio de afrolatino. Un día dijo que quiso hacer reguetón, siendo franco, al descubrir que Daddy Yankee era blanco. Mi llave, lo peor de todo y lo más grave es que este p&%$*jo es racista y no lo sabe”, canta en la última parte del tema que ya rebasó las 41 millones de vistas en YouTube.

Daddy Yankee fue una figura importante para que J. Balvin llegara al lugar donde está ahora, pero también es considerado por Residente como parte de una industria que le ha hecho la vida difícil a los integrantes de la comunidad afrolatina en Estados Unidos.

“Un sacrilegio, este blanquito de colegio, todavía no entiende el f*king privilegio”, sigue en los versos siguientes.

El conflicto ha sido tal que, según Raúl de Molina, conductor del programa El Gordo y la Flaca, Saúl “el Canelo” Álvarez, amigo de J. Balvin, intentó mediar con René para evitar que éste lanzara el tema. Aunque en un inicio parecía haber tenido éxito, Álvaro Osorio Gofar, padre del colombiano, publicó en sus redes sociales que “Residente también vende perritos calientes”. Hasta el momento, la única respuesta de José parece ser un tuit en el que sólo escribe “Amor y cariño”.