Longoria, la estrella mexicana del ráquetbol que vislumbra su futuro en la política
Es la mejor raquetbolista de la historia y una de las atletas más ganadoras en los Juegos Panamericanos. ¿Será también la futura presidenta de México?
Mejor ir por partes.
Paola Longoria cerró su participación en Santiago 2023 con dos oros, el último por equipos obtenido el jueves, con lo cual amplió a 11 el total de medallas doradas en su carrera. Quedó así a uno del récord histórico en manos de la canadiense Denise Parker, una tiradora con arco ya retirada.
En este deporte nacido en el continente americano y que el Comité Olímpico Internacional se empecina en no declararlo olímpico, la mexicana fue número uno del mundo durante 12 años, con una racha invicta de tres años y medio.
Pero a sus 34 años llegó el momento de pensar en una vida fuera de las canchas.
“Me caso el próximo año y el sueño es ser mamá. Esa es la siguiente faceta. No cierro el deporte, pero quiero disfrutar la vida”, dijo Longoria en entrevista con The Associated Press tras su última función en Santiago 2023 en el Centro de Raquetas.
Y en ese disfrutar la vida fuera de las canchas, la raquetbolista también tiene decidido lanzarse a la política.
“He recibido una oferta muy fuerte de un candidato a presidente", reveló la atleta, que tiene una maestría en Ciencias Políticas. "Me gusta, pero para el deporte. Me encantaría ser la ministra del Deporte”.
Las elecciones generales en México están fijadas para el 2 de junio.
Longoria no reveló qué aspirante a la presidencia la convocó.
“Para mí sería increíble. Gracias al deporte se me han abierto muchas oportunidades. En política, negocios, medios. Hay oportunidades para cuando ponga punto final”, indicó.
Entre tanto, tiene casi cerrado un contrato con una cadena para comentar los Juegos Olímpicos de París 2024, a los que desafortunadamente para ella no podrá concurrir como atleta.
“En algún momento fue una frustración, estar al tope de mi carrera y no poder ganar una medalla olímpica. Después entendí que las cosas pasan por algo”, apuntó.
Siempre impecable de aspecto, bien maquillada, con sus pestañas tupidas y las uñas pintadas con los colores de su país, Longoria se definió como “una mujer que soñó en grande, en poder ser la mejor del mundo, que sabía que no iba a ser nada sencillo. Que hay muchas horas de entrega, disciplina y pasión, de sacrificios. No llegas a ser la mejor del mundo de un día para el otro".
¿Y el legado?
“Les falta un poco de experiencia (al resto de las raquetbolistas mexicanas). Es un proceso. (Pero) el ráquetbol después de Paola Longoria puede quedar una gran camada de jugadoras”, concluyó.