“Sabía que estaba muerta”: hombre en Misisipi asesinó a su exnovia 5 días después de ser liberado bajo fianza
El padre de Lauren Johansen advirtió a una jueza días antes de la muerte de su hija que el agresor “la iba a matar si lo dejaban salir”
El padre de una joven estudiante de enfermería alega que suplicó a una jueza que no liberara al exnovio de su hija de la cárcel y le advirtió que “la va a matar” si lo hacía.
Sin embargo, la jueza hizo caso omiso de sus advertencias y cinco días después, el cuerpo de la joven de 22 años apareció mutilado en su propio coche. Además, la policía informó que su novio es el responsable.
La estudiante de la Universidad del Sur de Mississippi Lauren Johansen, que estaba cursando una licenciatura en enfermería, fue encontrada muerta el jueves en el vehículo que estaba estacionado en medio de un cementerio en el condado de Harrison, Mississippi.
Sus restos golpeados y ensangrentados estaban envueltos en bolsas de basura sobre los asientos traseros.
Ahora, su expareja, Bricen Rivers, de 23 años, está bajo arresto y se le imputó el cargo de su asesinato.
Rivers había sido puesto en libertad bajo fianza solo cinco días antes de la muerte de Johansen.
La policía metropolitana de Nashville detuvo por primera vez a Rivers el 12 de diciembre por un delito de secuestro con agravantes, según los documentos de acusación.
El padre de Johnasen, Lance Johansen, alegó que Rivers había retenido a su hija como rehén y la había golpeado mientras la pareja estaba de vacaciones en Nashville, Tennessee, reveló a WLOX News.
No se ha confirmado si la detención de Rivers está relacionada con ese presunto incidente.
La fianza de Rivers se fijó inicialmente en USD 250.000, según la fiscalía del condado de Davidson. Pero meses después, la jueza Cheryl Blackburn la redujo significativamente a USD 150.000.
“Me senté en la sala del tribunal de Nashville y le dije a la jueza que la iba a matar si lo dejaban salir”, declaró Johansen, un respetado cirujano ortopédico.
El lunes, el padre recibió un inquietante mensaje de voz de la fiscalía para advertirle que Rivers había sido puesto en libertad y que no podían localizarlo.
“Lo dejaron salir sin decirnos, y no le pusieron el monitor de tobillo. Simplemente, lo dejaron salir de la cárcel”, detalló Johansen.
Una fuente de la fiscalía compartió que se suponía que Rivers debía presentarse en una empresa de GPS para que le colocaran un monitor de tobillo. También se le indicó que no podía salir del condado de Davidson.
“Pero en cuanto lo pusieron en libertad, faltó a su cita con la empresa de seguimiento por GPS y no se ha vuelto a saber de él”, le indicó al padre un empleado de la fiscalía en una grabación que WLOX News obtuvo.
“Quería asegurarme de que Lauren está a salvo”, añadió el empleado.
Johansen intentó llamar a su hija de inmediato, pero nunca contestó el teléfono. Tras recibir un mensaje de su teléfono, notó que había algo raro en la respuesta.
En la madrugada del martes, la aplicación familiar de rastreo de ubicaciones de la estudiante se había desconectado y su hija menor —que vivía con su hermana— mencionó que no había estado en casa.
La puerta principal de su casa estaba abierta de par en par, las cámaras de seguridad estaban destruidas y su coche había desaparecido.
La familia denunció la desaparición del vehículo ante el Departamento de Policía de Hattiesburg, que se encargó de localizarlo y hacer el trágico descubrimiento.
“Sabía que estaba muerta”, expresó Johansen.
El angustiado padre expuso que “le destrozaron la cara, la cabeza, la golpearon de una manera brutal”, antes de añadir que tenía “múltiples agujeros en la cabeza”.
Al parecer, Rivers huyó cuando las autoridades llegaron al lugar y lo detuvieron varias horas después tras encontrarlo en el bosque.
Law & Crime consiguió los registros de la cárcel, que muestran que Rivers fue fichado con una fianza de USD 1.000.000 poco después de la medianoche del 4 de julio.
The Independent se puso en contacto con la policía metropolitana de Nashville, el Departamento de Policía de Hattiesburg, la fiscalía del condado de Davidson y el juez Blackburn en busca de comentarios.
Traducción de Michelle Padilla