Sean “Diddy” Combs: estos son los delitos por los que está acusado
Un jurado compuesto por 12 personas analiza las acusaciones contra el empresario musical
Sean “Diddy” Combs podría conocer pronto su destino judicial en el juicio federal en el que se le acusa de asociación ilícita y tráfico sexual.
Esto ocurre casi diez meses después de que fiscales federales en Manhattan presentaran una acusación penal de tres cargos contra el magnate de la música, en la que lo acusan de transporte con fines de prostitución y conspiración, presuntamente cometidos durante más de 17 años. Según la fiscalía, Combs habría coaccionado y drogado a mujeres para que participaran en “actos sexuales cuidadosamente orquestados”, conocidos por él como “freak offs”. Estas sesiones, que en ocasiones se extendían por varios días, también incluían la presencia de trabajadores sexuales masculinos, de acuerdo con el testimonio de varios testigos.
Tras siete semanas de declaraciones en un tribunal federal de Nueva York, un jurado compuesto por 12 personas delibera ahora sobre el veredicto en este caso de alto perfil.
Estos son los cargos contra Diddy y qué significan:
Cargo 1: asociación ilícita o asociación tipo mafia
El gobierno acusó a Sean Combs de violar la ley contra organizaciones corruptas e influenciadas por la extorsión (conocida como ley RICO), al conspirar con una red criminal para llevar a cabo un patrón continuo de actividades ilegales.
Según los fiscales, Combs habría dirigido una organización delictiva integrada por miembros de su personal y allegados, con el fin de cometer diversos crímenes, entre ellos: tráfico sexual, secuestro, trabajos forzados, soborno, incendio premeditado y obstrucción a la justicia desde al menos 2008.
De acuerdo con la acusación, estas acciones habrían tenido como objetivo abusar, amenazar y coaccionar a mujeres y otras personas para satisfacer sus deseos sexuales, mientras protegía su reputación pública mediante la ocultación sistemática de su comportamiento.
La ley RICO, creada en 1970, fue originalmente diseñada para perseguir a miembros del crimen organizado, como la mafia.
Este cargo es el más grave de todos los presentados y conlleva una pena máxima de cadena perpetua.
Cargo 2: Tráfico sexual por medio de fuerza, fraude o coacción
Sean Combs fue acusado de un cargo de tráfico sexual relacionado con la “Víctima 1”, identificada como su expareja, la cantante Cassie Ventura.
Según los fiscales, Combs atrajo a Ventura a su entorno tras firmar un contrato con su sello discográfico, Bad Boy Records, e iniciar una relación con ella.
La propia Ventura testificó que temía a Combs, quien la habría maltratado físicamente en diversas ocasiones, y aseguró que hacía todo lo posible por complacerlo, incluso participar en lo que él llamaba “freak offs”: encuentros sexuales prolongados, impulsados por drogas, organizados por el productor.
De acuerdo con el testimonio, Combs contrataba escort masculinos y observaba cómo tenían relaciones sexuales con Ventura. A veces, los grababa para, según ella, usarlos después como forma de chantaje.
Este cargo conlleva una pena mínima de 15 años de prisión y una pena máxima de cadena perpetua.
Cargo 3: Transporte con fines de prostitución
El gobierno acusó a Sean Combs de un cargo de transporte con fines de prostitución, vinculado a su expareja Cassie Ventura. Según los fiscales, el productor musical transportó de manera deliberada a Ventura y a trabajadores sexuales masculinos dentro de Estados Unidos y al extranjero con el objetivo de que participaran en actividades sexuales pagadas.
Entre 2009 y 2018, Combs habría cubierto los gastos de vuelos para trasladar a Ventura y a escorts masculinos a distintas ciudades como Nueva York, Los Ángeles, Miami e Ibiza, donde presuntamente se realizaban en los “freak offs”.
Combs y Ventura reclutaban a trabajadores sexuales masculinos, principalmente a través del servicio de acompañantes Cowboys 4 Angels. Los participantes recibían hasta $6.000 dólares por asistir a los “freak offs”, aunque solo se les pagaba si Combs consideraba que habían cumplido con sus expectativas.
Este cargo conlleva una pena máxima de 10 años de prisión.
Cargo 4: Tráfico sexual por medio de fuerza, fraude o coacción
Sean Combs fue acusado de un cargo de tráfico sexual vinculado a una segunda mujer identificada bajo el seudónimo de “N. N.”, también exnovia del acusado.
De acuerdo con los fiscales, Combs atrajo a “N. N.” a su entorno con la promesa de viajes lujosos, regalos costosos y una relación sentimental genuina. Luego, habría ejercido presión económica sobre ella, por ejemplo, pagándole el alquiler, para obligarla a participar en los encuentros sexuales organizados por el magnate.
“N. N.” declaró en el juicio que se sintió obligada a participar en estas sesiones sexuales debido a su dependencia económica de Combs.
Este cargo conlleva una pena mínima de 15 años de prisión y una pena máxima de cadena perpetua.
Cargo 5: Transporte con fines de prostitución
Combs también enfrentaba un cargo adicional de transporte con fines de prostitución, vinculado a los viajes de “N. N.” y acompañantes masculinos.
Según la fiscalía, entre 2021 y 2024, Combs organizó el traslado de “N. N.” a través de distintas fronteras estatales para que participara en los “freak offs”, encuentros sexuales que a veces eran grabados en video.
Este cargo conlleva una pena máxima de 10 años de prisión.
Traducción de Leticia Zampedri