Nueva variante afecta a varios deportes en Sudáfrica

El golf, el cricket y el rugby se convirtieron el viernes en los primeros deportes afectados por la nueva variante del COVID-19, la cual ha desatado temores frente a una reanudación de las restricciones de viaje y alterado competiciones justo cuando recomenzaban a regresar a la normalidad tras casi dos años de pandemia.

Los golfistas europeos se retiraron a media competición del torneo inicial de temporada del DP World Tour en Johannesburgo y se apresuraban a tomar sus vuelos para irse de Sudáfrica. Los equipos visitantes de cricket y rugby hacían lo mismo.

El golf fue el primer afectado por la emergencia frente a la nueva variante B.1.1.529 identificada inicialmente en Sudáfrica y que ha suscitado temores de que pudiera ser más transmisible y resistente a las vacunas que las variantes actuales.

Ya fue detectada en Israel Hong Kong y Bélgica así como en otros países del sur de África

Aunque el comienzo del World Tour de golf quedó arruinado, los partidos de rugby en Sudáfrica correspondientes a un nuevo torneo europeo-sudafricano fueron pospuestos “debido a los súbitos acontecimientos”, dijeron los organizadores. Una gira por Sudáfrica del equipo de cricket de India prevista para el mes entrante fue reconsiderada, aunque se carecía aún de anuncio oficial alguno.

El equipo de cricket de Holanda que participa en una serie en Sudáfrica, sopesaba cancelar sus partidos restantes y regresar a su país. La Real Federación Holandesa de Cricket dijo que examinaba opciones pero que era “improbable” que pudiera encontrar vuelos con poca antelación.

“La salud física y mental de los jugadores es la máxima prioridad”, señaló la federación.

Los organizadores del Abierto Joburg de golf, que comenzó el martes, dijeron que el torneo continuará incluso después del retiro de al menos 23 jugadores, en su mayoría europeos. Estos jugadores decidieron marcharse apenas horas después de que las autoridades sudafricanas de salud anunciaran que habían detectado la nueva variante.

Después, el torneo fue reducido a 54 hoyos y tres rondas para que concluya el sábado “a fin de ayudar a los jugadores, caddies y personal de apoyo que no resida en Sudáfrica a que regresen a sus países”, según los organizadores.

El Abierto Joburg estaba programado como el primero de tres competiciones en Sudáfrica para comenzar la nueva campaña en el circuito antes conocido como European Tour.

Sin embargo, el Abierto Sudafricano de la semana entrante será ahora una competición únicamente sudafricana debido a que los jugadores internacionales quizá regresen a sus países antes de que éstos impongan restricciones de viaje. El Campeonato Alfred Dunhill previsto del 9 al 12 de diciembre fue cancelado.

Muchos jugadores provenientes de Gran Bretaña e Irlanda se retiraron del Abierto Joburg en reacción al anuncio de Londres de que prohibiría nuevamente la llegada de visitantes de Sudáfrica y de otros cinco países sudafricanos a partir de las 4 de la mañana del domingo.

Los residentes tendrán que someterse a su regreso a una cuarentena obligatoria de 10 días en hoteles designados.

La Unión Europea y Estados Unidos anunciaron que también suspenderán los vuelos procedentes de la región sudafricana mientras otras naciones en diversas partes del mundo comienzan a imponer de nuevo restricciones de viaje.

No todos se estaban yendo. El golfista escocés David Drysdale dijo que decidió continuar jugando en el Abierto Joburg y permanecer en Sudáfrica con su esposa, que es su caddy, y tomar el asunto como vacaciones.