Microsoft lanza proyecto para combatir la desinformación
La gente está sedienta de información veraz y confiable en internet y probablemente solo necesita ayuda para encontrarla, según un nuevo proyecto sobre consumo de noticias lanzado por Microsoft
La gente está sedienta de información veraz y confiable en internet y probablemente solo necesita ayuda para encontrarla, según un nuevo proyecto sobre consumo de noticias lanzado por Microsoft.
La compañía tecnológica trabajó con Trust Project, un consorcio sin fines de lucro de organizaciones noticiosas, para crear anuncios donde se le informa a usuarios de internet sobre ocho “indicadores de confiabilidad” que pueden usarse para evaluar la credibilidad de un website. Los indicadores incluyen el señalamiento claro de artículos de opinión, un código de conducta y la atribución de fuentes.
La mayoría de los que vieron la lista expresaron mayor confianza en su capacidad de encontrar información veraz y de evadir la desinformación, un hallazgo prometedor que sugiere que la comprensión periodística podría ser una solución a escala y a bajo costo del complejo problema de la desinformación.
“Este fue un poco como un experimento para nosotros”, dijo Ginny Badanes, directora de la “Democracy Forward Initiative”, una iniciativa de Microsoft por fortalecer la democracia y el periodismo online. “El mundo está cambiando muy rápidamente y la gente necesita herramientas para estar bien equipada”.
Hay mucho en riesgo. Se considera que la desinformación en plataformas como Twitter, Facebook y YouTube ha provocado polarización política, la desconfianza en las instituciones democráticas, la resistencia a las vacunas, las denuncias infundadas de fraude electoral y el extremismo violento.
La velocidad y poder de internet podría hacer que la lucha contra la desinformación luzca imposible. Las evaluaciones de veracidad sobre contenidos periodísticos ayudan, pero requieren mucho esfuerzo, no son leídas por todos y no convencerán a los que ya desconfían del periodismo tradicional. Los filtros aplicados por las compañías tecnológicas suelen ser inconsistentes y solo empujan a la desinformación hacia otros canales, y provocan denuncias de parcialización y censura. Los esfuerzos por regular internet son sumamente difíciles desde el punto de vista político y legal.
Las gestiones para promover el pensamiento crítico y la comprensión periodística, sin embargo, han mostrado un notable éxito en ayudar a la gente a aprender a detectar la desinformación. Google lanzó una serie de videos en YouTube en Europa oriental el año pasado para enseñarle a la gente cómo funciona la desinformación; recientemente, la campaña fue ampliada a Alemania.