Panel solar capaz de transmitir electricidad a cualquier punto de la Tierra desde el espacio fue probado por científicos del Pentágono
La aplicación de mayor alcance de la tecnología de transmisión de energía es la 'transferencia continua de energía eléctrica ilimitada a la Tierra', afirma un estudio
Un panel solar capaz de transmitir electricidad a cualquier punto de la Tierra desde el espacio ha sido probado con éxito por científicos que trabajan para el Pentágono.
El módulo de antena de radiofrecuencia fotovoltaica (PRAM) tiene actualmente el tamaño de una caja de pizza, pero la tecnología podría ampliarse para enviar cantidades masivas de energía limpia y renovable a la Tierra a través de microondas.
El panel solar, que se puso en órbita el año pasado a bordo del secreto avión espacial X-37B de la Fuerza Aérea de los EE. UU., retiene la energía de la luz solar que no atraviesa la atmósfera terrestre. Esto significa que es capaz de aprovechar la energía solar de una manera que es imposible con configuraciones terrestres.
"Estamos recibiendo una tonelada de luz solar adicional en el espacio solo por eso", dijo a CNN el doctor, Paul Jaffe, un co-desarrollador del proyecto.
"El siguiente paso lógico es escalarlo a un área más grande que recolecte más luz solar, que convierta más en microondas".
Lee más: SpaceX lanza nuevos satélites Starlink, pero no logra aterrizar el refuerzo
La configuración actual solo es capaz de capturar y transmitir alrededor de 10 vatios de energía a la Tierra, lo suficiente para alimentar un dispositivo electrónico portátil.
Sin embargo, si se amplía con éxito, la tecnología podría entregar cantidades significativas de energía a regiones remotas del mundo, así como aliviar las redes eléctricas sobrecargadas en áreas urbanizadas.
La versatilidad del sistema significa que también se puede utilizar para ayudar en situaciones de emergencia o desastres naturales.
“La ventaja única que tienen los satélites de energía solar sobre cualquier otra fuente de energía es esta transmisibilidad global”, dijo el doctor Jaffe, quien escribió por primera vez su tesis sobre la transmisión de energía de microondas desde el espacio en 2013.
"Puede enviar energía a Chicago y una fracción de segundo después, si es necesario, enviarla a Londres o Brasilia".
Para realizar este potencial se necesitarían antenas espaciales de un kilómetro de ancho, que a los actuales costes de los esfuerzos espaciales comerciales no son económicamente viables.
Pero la aparición de una rápida reutilización de cohetes a través de empresas privadas como Blue Origin de Jeff Bezos y SpaceX de Elon Musk significa que los costos están disminuyendo rápidamente y podrían permitir que el sistema sea viable en el futuro.
Los resultados de los experimentos se publicaron en un estudio en el IEEE Journal of Microwaves, que explicó que la aplicación de mayor alcance de la tecnología de transmisión de energía es la “transferencia continua de energía eléctrica ilimitada a la Tierra”.
Se planean múltiples lanzamientos en órbita para 2023, destinados a demostrar aún más las tecnologías clave de la energía solar basada en el espacio.