Científicos encuentran un agujero negro diferente a cualquier otro descubierto antes
Se trata de un agujero negro de masa estelar inactivo
Los científicos encontraron un agujero negro inactivo que no se parece a ningún otro descubierto antes.
Los investigadores afirman que no hay ninguna otra explicación para los inesperados datos, que muestran la existencia de un agujero negro de masa estelar en la Gran Nube de Magallanes, la galaxia vecina de nuestra Vía Láctea.
La estrella que originó el agujero negro parece haberse desvanecido sin que se produjera una potente explosión, afirman los investigadores.
Ya se han encontrado otros agujeros negros como este. Pero los especialistas afirman que se trata del primer objeto de este tipo detectado de forma inequívoca: un agujero negro de masa estelar inactivo.
El descubrimiento es notable, en parte, porque el equipo que lo llevó a cabo recibió el apodo de “policía de los agujeros negros” o “destructores de agujeros negros”, como resultado de su trabajo previo para demostrar que otros descubrimientos de agujeros negros estaban realmente equivocados.
“Por primera vez, nuestro equipo se reunió para reportar el descubrimiento de un agujero negro, en lugar de rechazar uno”, señaló el líder del estudio, Tomer Shenar, de la Universidad de Ámsterdam, en un comunicado.
Los investigadores describieron el agujero negro como una “aguja en un pajar”. Los astrónomos creen que los agujeros negros inactivos son relativamente comunes en todo el universo, pero sabemos muy poco de ellos y los ejemplos confirmados son raros.
Son difíciles de detectar, en parte porque al estar inactivos no interactúan mucho con su entorno. Los astrónomos llevan años buscándolos, pero con dificultades.
Además, hay toda una serie de explicaciones para muchos de los fenómenos que indican tales agujeros negros, lo que significa que confirmarlos puede ser difícil.
Para encontrar el nuevo ejemplo, los científicos observaron casi 1.000 estrellas masivas en la nebulosa de la Turantula, que forma parte de la Gran Nube de Magallanes. Buscaron ejemplos que pudieran tener agujeros negros acompañándolos.
Finalmente, descubrieron la VFTS 243. Posteriormente comprobaron que en realidad se trataba de un agujero negro, teniendo en cuenta el escepticismo que pueden suscitar tales hallazgos, y dicen estar seguros de lo que han encontrado, aunque animan a seguir investigando.
“Por supuesto, espero que otros investigadores analicen detenidamente nuestro descubrimiento e intenten elaborar modelos alternativos”, afirma Kareem El-Badry, coautor del artículo, quien recibe el apodo de “destructor de agujeros negros”.
Hoy se publica en Nature Astronomy un artículo en el que se describen los hallazgos, titulado “An X-ray quiet black hole born with a negligible kick in a massive binary within the LMC” (Un agujero negro silencioso con rayos X nacido con un impacto insignificante en una binaria masiva dentro de la LMC [Gran Nube de Magallanes]).