Reed Jobs: El hijo de Steve Jobs se niega a comentar sobre postulación para el escaño de Pelosi

Reed Jobs, el hijo del cofundador de Apple, Steve Jobs, se negó a comentar en un artículo sobre los rumores de que una vez consideró postularse para el escaño de Nancy Pelosi en el Congreso cuando por fin se jubile.

La presidenta de la Cámara de Representantes, de 81 años, quien ha representado a San Francisco desde 1987, anunció el mes pasado que se postulará para la reelección este año. Sin embargo, si el Partido Republicano recupera la Cámara, como se espera, muchos anticipan que podría renunciar al liderazgo demócrata y retirarse de su escaño al final del próximo mandato.

Mientras persiste la especulación limitada sobre quién podría suceder a la congresista cuando deje vacante su escaño, ya sea en 2024 o más tarde, el nombre de Jobs, de 30 años, ha aparecido en un breve artículo para el sitio de noticias Puck el cual afirma que ha reflexionado sobre ocupar su puesto cuando quede libre.

Específicamente, el sitio informa que “una persona que ha hablado de política con él” afirma que dijo que “consideraría seriamente postularse para el puesto” después de la jubilación de Pelosi. Sin embargo, esos comentarios estaban fechados “a principios del año pasado” (es decir, 2021), antes de que quedara claro que Pelosi se postulará de nuevo.

Jobs se negó a comentar y, según el sitio, “una persona cercana a él rechazó la premisa”.

Nacido en 1991, Jobs es el hijo mayor de Steve y Laurene Powell Jobs, y administra inversiones en salud en Emerson Collective de la familia Jobs, una corporación con fines de lucro que invierte en temas importantes, incluidos asuntos ambientales y de salud.

Para ser claros, Jobs no tiene una carrera política y no hay señales de que alguna vez haya hecho algún movimiento concreto para postularse para un cargo. Mantiene un perfil público relativamente bajo y, hasta el momento, no hay señales de que esto vaya a cambiar.

También hay muchas otras figuras sugeridas de manera habitual como sucesoras de Pelosi, cuyo escaño sería uno de los bastiones demócratas más seguros del país, incluso sin el beneficio de un titular de mucho tiempo.

Entre las personas que se mencionan a menudo como sucesoras potenciales se encuentra su propia hija Christine, una sugerencia que irrita a muchos progresistas que ven a Pelosi como la encarnación de un establishment demócrata demasiado corporativo dominado por los intereses de los ricos.

Pelosi se enfrentó a un rival demócrata por su escaño en 2020, Shahid Buttar, un defensor legal y activista progresista que montó un desafío muy crítico desde la izquierda. Lo respaldaron varias figuras progresistas conocidas, pero al final obtuvo menos del 23 por ciento de los votos.