La “selfi filtrada” de Pete Davidson a Kanye West muestra que el triángulo amoroso llegó demasiado lejos

Sabes que algo salió mal cuando le envías una selfi tuya desde la cama de tu pareja a su ex.

No es un buen ejemplo de #MeGustaríaSerEsaPareja. Y, sin embargo, este es solo el último desarrollo de una serie de teatralidades extrañas y vengativas que involucran a Kim Kardashian, su nuevo novio Pete Davidson y su exesposo, Kanye West, que ahora se hace llamar “Ye”.

La relación entre Kardashian, una multimillonaria y feroz magnate de los reality shows famosa por su figura, y Davidson, un desaliñado comediante mariguano que una vez se comparó a sí mismo con un “panda anoréxico”, parecía improbable desde el principio. Cuando surgieron los rumores de su romance en octubre, internet se volvió loco como siempre cuando se ve a Davidson del brazo de otra mujer hermosa y exitosa: sus exparejas incluyen a Kaia Gerber, Phoebe Dynevor y Ariana Grande. Pero Kardashian era diferente.

Para empezar, ella estaba en medio de un divorcio muy público, y supuestamente muy desordenado, de West. Para complicar más las cosas, la expareja, que estuvo junta durante ocho años, también tiene cuatro hijos: North (8), Saint (6), Chicago (4) y Psalm (2). Tampoco ayudó que Kardashian fuera una de las mujeres más famosas del mundo, ya que su vida personal sirvió como forraje de reality show durante 14 años en Keeping Up with the Kardashians de E!.

Pero lo que comenzó como una entretenida rivalidad, de esas que se esperan entre el ex de una persona y su actual pareja, se ha puesto fea. En enero, West estrenó la canción ‘Eazy’, que incluía letras que nombraban a Davidson: “Dios me salvó del choque, para poder darle a Pete Davidson un buen golpe”. El rapero aparentemente aludió a la estrella de SNL (Saturday Night Live) nuevamente en el sencillo de Fivio Foreign, ‘City of Gods’, en el que participa con la letra: “Esta tarde, cientos de matones llegan a SNL, cuando yo llegue, estará muerto cuando entre”.

Sin embargo, las cosas se intensificaron aún más el 12 de febrero, cuando West publicó una nota escrita a mano en Instagram informando a los fans que Kid Cudi no aparecería en su álbum, Donda, “porque es amigo de ya saben quién”, que los fans interpretaron como Davidson, ya que es amigo del rapero. West procedió a compartir una imagen de sí mismo con Kid Cudi y Davidson en una cena y solo el rostro del comediante estaba tachado con una “X” roja gigante.

Después hubo una serie de publicaciones de Instagram ahora eliminadas, incluida una que pedía a los fanáticos que no “hicieran nada físico” a Davidson, junto con una captura de pantalla de mensajes de texto supuestamente entre West y Kardashian. También hubo memes, algunos de los cuales mostraban a Kid Cudi, mientras que otros mostraban a Davidson y Kardashian. En uno, parecía como si West hubiera superpuesto su rostro en un superhéroe de Marvel junto a gente como Julia Fox, Drake, Travis Scott y Future. Mientras tanto, en su lado “enemigo”, estaban Davidson, Kardashian y Taylor Swift en referencia a la famosa enemistad del rapero con la estrella del pop.

Ha habido innumerables otras burlas, algunas por las que West se disculpó, pero ninguna se compara con las hechas en el vídeo musical de West para ‘Eazy’, en el que se ve al rapero enterrando viva una figura de plastilina animada de Davidson. Sí, en serio. Como si eso no fuera lo suficientemente alarmante, West siguió con un segundo vídeo que mostraba una versión animada de Davidson siendo golpeado por un mono desollado.

A fin de cuentas, tal vez no sea de extrañar que Davidson finalmente haya subido al ring, habiendo permanecido callado, sobre todo hasta ahora. Si los mensajes de texto filtrados entre él y West sirven de guía, parece que Davidson está llegando a su límite después de pasar semanas tratando de aplacar los ataques públicos de West. Las capturas de pantalla de su supuesta conversación muestran a Davidson calificando las acciones de West como “vergonzosas” y afirma que ha impedido que SNL “hable o se burle de” West, “algo que llevan meses queriendo hacer”.

Todo esto sería bastante admirable si no fuera por el hecho de que, después de que West le preguntó dónde estaba, Davidson respondió con esa selfi.

Es fácil descartar todo esto como otro drama de Hollywood que se desarrolla detrás de nuestras pantallas. Pero están surgiendo preocupaciones muy reales a raíz de esta odisea en curso. Si dichas inquietudes no son acerca de la salud mental, algo con lo que tanto West como Davidson han lidiado abiertamente, entonces son en relación con los cuatro hijos pequeños de Kardashian, quienes inevitablemente sentirán los efectos de la acritud muy publicitada de sus padres hasta cierto punto.

Seguramente este es el punto en el que los fanáticos y los usuarios de las redes sociales pueden reconocer que las cosas fueron demasiado lejos. Incluso si la publicidad es el objetivo final, como sugiere Davidson que por eso lo hace West, tenemos la capacidad de no involucrarnos. Además, una vez que quitas el histrionismo, el problema fundamental aquí es uno que probablemente todos hemos vivido. Ver a tu ex seguir adelante con otra persona siempre será difícil, al igual que entablar una relación con una persona recién divorciada. Entonces, es momento de tener un poco de empatía.

Además, por muy tentador que sea ver cómo la vida amorosa de una de las estrellas más divisivas de Internet se desmorona rápidamente, hacerlo se remonta a una era arcaica de los medios que hablan sobre celebridades, una en la que el dolor y la angustia de una estrella representaban dinero y ventas de revistas. ¿No hemos aprendido nada? Porque hay seres humanos reales en el centro de esta historia, y sus luchas internas y rivalidades no son nada para celebrar.

The Independent se ha puesto en contacto con los representantes de West, Davidson y Kardashian en busca de comentarios.