Stacey Plaskett asegura que Trump podría enfrentar cargos derivados de la manipulación electoral

El expresidente también puede estar abierto a presenciar cargos de intimidación, según su exabogado

Graig Graziosi
Martes, 16 de febrero de 2021 18:27 EST
Con este telón de fondo, el historial constante de intimidación de Trump es motivo de grave preocupación para cualquier otro mecanismo destinado a responsabilizarlo en el futuro.
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Donald Trump pudo haber eludido una condena de juicio político, pero sus problemas legales parecen estar lejos de terminar.

La congresista Stacey Plaskett, una de las gerentes de acusación de la Cámara que presentó el caso de incitación contra el expresidente en su juicio en el Senado, acusó a Trump y sus aliados en el Partido Republicano de obstruir la justicia en sus dos juicios de acusación.

Plaskett apareció en Morning Joe de MSNBC y discutió la posibilidad de que Trump enfrente cargos derivados de su retórica y acciones que condujeron a la insurrección del Capitolio de Estados Unidos.

"Esperemos que muchas jurisdicciones en los Estados Unidos presenten cargos contra el expresidente", dijo Plaskett. "Distrito de Columbia, por incitar a la violencia, Georgia por manipulación e intimidación electorales. Nueva York, volviendo a sus finanzas. Nunca pudimos descubrir problemas relacionados con violaciones de la cláusula de emolumentos mientras el presidente estaba en el cargo. Todos esas cosas seguirán avanzando".

Plaskett indicó que Trump aún podría enfrentar repercusiones por los cargos derivados de la investigación de Robert Mueller, y que los demócratas de la Cámara de Representantes aún buscan el testimonio del exabogado de la Casa Blanca, Don McGahn.

"Todavía estamos en la corte luchando a través del sistema judicial para tratar de obtener el testimonio de McGahn de la primera investigación y juicio político", dijo Plaskett. "Esa es todavía una investigación en curso por parte de la Cámara, por lo que Goldman sabe muy bien de lo que es capaz el presidente, y eso sólo para mí resalta cuán increíblemente valientes Jaime Herrera Beutler, Liz Cheney, Adam Kinzinger y estos otros estadounidenses, el senador (Bill ) Cassidy y los demás que resistieron la intimidación de Donald Trump y sus seguidores".

Trump y sus aliados en el Congreso también podrían enfrentar cargos de intimidación de testigos por amenazas percibidas hechas a testigos que pueden haber prestado testimonio del ataque al Capitolio.

El gerente de acusación, Jamie Raskin, había planeado llamar Herrera Beutler, una republicana, para testificar antes de que los fiscales decidieran no llamar a ninguno.

Antes de que los gerentes de juicio político revoquen su llamado a testigos, la representante republicana Marjorie Taylor Greene escribió un tweet en el que invocaba a la base de partidarios de Trump y advirtió a Herrera Beutler que la estaban observando.

"Primero votando para acusar al inocente presidente Trump, luego gritando a la prensa y tirando a @GOPLeader debajo del autobús", escribió Greene. "Los 75 millones leales de Trump están mirando".

Daniel S Goldman, un abogado del primer equipo de defensa de juicio político de Trump, escribió un artículo de opinión para The Washington Post afirmando que tales comentarios podrían interpretarse como amenazas destinadas a intimidar a los testigos.

Goldman también señaló al secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, quien enfrentó numerosas amenazas para él y su familia cuando Trump y los exsenadores republicanos David Perdue y Kelly Loeffler lo señalaron como la razón por la que el expresidente perdió las elecciones de 2020 en Georgia.

"La retórica incendiaria de Trump hizo que el funcionario electoral de Georgia, Gabriel Sterling, advirtiera que resultaría en violencia, después de lo cual Sterling también recibió amenazas de muerte", escribió.

Goldman dijo que el historial de intimidación de testigos de Trump probablemente afectaría cualquier intento futuro de presentar cargos contra él.

"A raíz de los disturbios en el Capitolio liderados por grupos armados que operan bajo la dirección de Trump, las palabras y amenazas del expresidente adquieren un nuevo significado", escribió Goldman. "Las amenazas de violencia ya no son abstractas. Con este telón de fondo, el historial constante de intimidación de Trump es motivo de grave preocupación para cualquier otro mecanismo destinado a responsabilizarlo en el futuro".

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