Mujer que falleció a los 117 años reveló que tres yogures al día podrían ser el secreto de la longevidad

Maria Branyas Morera murió en agosto de 2024 en Cataluña, España. En una entrevista, había explicado que, además del yogur, comía una gran variedad de frutas y vegetales

Rebecca Whittaker
Miércoles, 14 de mayo de 2025 01:43 EDT
La persona más anciana del mundo revela las claves de una larga vida
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La clave de una larga vida es comer mucho yogur, según una mujer que vivió hasta los 117 años.

Maria Branyas Morera era la persona viva más anciana de la Tierra y, desde que murió en agosto de 2024, ha sido objeto de interés científico.

Un grupo de investigadores de Barcelona (España) estudió su microbioma intestinal y publicó un artículo sobre sus hallazgos.

Los resultados aún no han sido revisados por expertos en supercentenarios —personas que viven más de 110 años —, pero permiten comprender cómo las elecciones dietéticas pueden ayudar a prolongar la vida.

El estudio sugirió que Morera tenía un intestino excepcionalmente sano y unas células que funcionaban como si tuvieran 17 años menos que su edad.

El yogur es especialmente bueno para mejorar la salud intestinal porque contiene bacterias
El yogur es especialmente bueno para mejorar la salud intestinal porque contiene bacterias (iStock)

Los investigadores afirman que su microbioma era “antiinflamatorio” y contenía altos niveles de bifidobacterias, un género de bacterias gastrointestinales, también conocidas como microbiota intestinal, que residen en nuestro tracto digestivo.

Antes de morir, Morera declaró a un entrevistador que el secreto de su longevidad era evitar el tabaco y el alcohol, dar paseos diarios, seguir una dieta rica en frutas y verduras y comer tres yogures al día.

También atribuyó su larga vida a estar rodeada de amigos y familiares y a evitar a la “gente tóxica”.

Se cree que la dieta variada de Morera, a base de fruta y verdura y mucho yogur, mejoró su salud intestinal y quizá incluso prolongó su esperanza de vida.

En el interior de nuestro tracto gastrointestinal hay billones de bacterias y microbios, que conforman el microbioma intestinal. Esto es fundamental para mantener en funcionamiento el sistema inmunitario.

Quienes tienen una mayor variedad de microbios en el intestino presentan una menor inflamación, lo que se sabe que disminuye el riesgo de padecer enfermedades crónicas como cardiopatías y diabetes de tipo 2; por eso los expertos creen que una buena salud intestinal aumenta la longevidad.

Morera falleció en España, en la Residencia Santa María del Tura de Olot, en Cataluña, donde vivía desde el año 2000
Morera falleció en España, en la Residencia Santa María del Tura de Olot, en Cataluña, donde vivía desde el año 2000 (@MariaBranyas112/X)

Sin embargo, el yogur es especialmente bueno para mejorar la salud intestinal porque es un alimento fermentado: se elabora calentando leche, añadiéndole bacterias e incubándola. Este proceso produce probióticos y, cuando se consumen, las bacterias pueden ayudar al intestino superando a los microbios dañinos.

“El yogur natural contiene cultivos bacterianos vivos que ayudan a mantener un microbioma intestinal equilibrado, que desempeña un papel en todo, desde la digestión hasta la inmunidad, el estado de ánimo y la inflamación”, explica a The Independent Rob Hobson, nutricionista y autor del libro Unprocess Your Life.

“El consumo regular de lácteos fermentados como el yogur también se ha relacionado con niveles más bajos de inflamación y un menor riesgo de enfermedades metabólicas, ciertos tipos de cáncer y el declive relacionado con la edad”, añadió.

Pero subrayó que el yogur no es una “solución milagrosa”. En su lugar, lo que contribuyó a la longevidad y salud intestinal de Morera fue la calidad general de su dieta y estilo de vida.

Comer frutas y verduras variadas es una de las mejores cosas que podemos hacer por nuestro intestino, según Hobson. Explicó: “Están repletas de fibra y polifenoles, compuestos vegetales que alimentan a las bacterias intestinales beneficiosas y las ayudan a desarrollarse. Esto aumenta la diversidad microbiana, que es un fuerte marcador de la buena salud intestinal”.

“A su vez, los microbios producen ácidos grasos de cadena corta, como el butirato, que ayudan a reducir la inflamación y a mantener sano el revestimiento intestinal”, agregó.

Además, es probable que caminar a diario también contribuyera a mejorar la salud intestinal de Morera.

Esto se debe, según Hobson, a que “el movimiento regular favorece el crecimiento de bacterias beneficiosas, especialmente las que producen ácidos grasos de cadena corta como el butirato. Estos ácidos, a su vez, reducen la inflamación y favorecen el revestimiento intestinal”.

Traducción de Sara Pignatiello

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