La pandemia ha atrofiado el desarrollo de las habilidades sociales en los niños

El organismo de control de la educación de Inglaterra descubrió que se disparó el número de niños pequeños que no pueden entender las expresiones faciales después de que la pandemia arruinó la oportunidad regular de desarrollar habilidades sociales y emocionales.

Los más afectados fueron los niños más vulnerables, que normalmente vivían en casas más pequeñas sin espacio al aire libre y pasaban más tiempo frente a las pantallas, según la inspectora jefe de Ofsted, Amanda Spielman.

Ella dijo que los “desafíos persistentes” creados por la serie de confinamientos nacionales se hicieron evidentes por una serie de cuatro informes sobre la recuperación de la educación publicados por Ofsted.

“Estoy particularmente preocupada por el desarrollo de los niños más pequeños que, si no se aborda, podría causar problemas en las escuelas primarias en el futuro”, agregó Spielman.

Ella le dijo al programa Today de BBC Radio 4: “En las limitaciones físicas del confinamiento, cuanto más pequeño era el hogar, o si vivían en un departamento sin un jardín, los niños en esas circunstancias estaban significativamente más limitados en sus oportunidades para hacer ejercicio que los niños que vivían en casas con grandes jardines”.

“Sabemos que ha habido efectos diferenciales y lo importante que es que pongamos el esfuerzo particularmente en los niños que han tenido la peor experiencia en los últimos años para ayudarlos a llegar a donde necesitan”.

En el informe sobre los primeros años, basado en las inspecciones de 70 proveedores de primeros años en enero y febrero de 2022, se encontró que algunos niños habían terminado con un “vocabulario limitado”mientras que “algunos bebés han tenido problemas para responder a las expresiones faciales básicas”, debido a que perdieron la oportunidad de oír conversaciones o escuchar historias.

Un proveedor dijo que, dado que los niños pequeños parecen haber pasado más tiempo frente a las pantallas, han comenzado a usar acentos y voces de los programas que han visto.

El uso de cubrebocas también sigue teniendo un impacto negativo en las habilidades de lenguaje y comunicación de los niños pequeños, mencionaron algunos proveedores.

“Los niños que van a cumplir dos años de edad habrán estado rodeados de adultos con cubrebocas durante toda su vida y, por lo tanto, no han podido ver los movimientos de los labios o las formas de la boca con tanta regularidad”, explicó el informe.

“Algunos proveedores han informado que los retrasos en el desarrollo del habla y el lenguaje de los niños los han llevado a no socializar con otros niños tan fácilmente como se hubiera esperado anteriormente”, agregó.

Spielman dijo: “Los niños han tenido menos tiempo en la educación temprana, menos tiempo de interacción con otras personas fuera de la familia. En el caso de algunos niños, no han tenido mucha interacción si han pasado todo el tiempo mirando pantallas. Los niños han estado hablando con las voces divertidas de los dibujos animados que han pasado mucho tiempo viendo”.

Además, dijo que la pandemia había creado retrasos en el aprendizaje del habla y el lenguaje y problemas con la interacción social y la confianza, como el no saber turnarse y tener dificultades para hacer amigos.

Agregó que los retrasos para caminar y gatear habían sido comunes como resultado de los confinamientos, lo que provocó un aumento en la obesidad infantil.

Los niños tampoco estaban al nivel esperado en el desarrollo de habilidades vitales de cuidado personal, como ir al baño, atarse los cordones de los zapatos y quitarse los abrigos, agregó.

Como resultado, las guarderías han ideado formas innovadoras para ayudar a los niños pequeños a ponerse al día, como compartir el aprendizaje entre el hogar y la guardería a través de un “grupo de charla” con un diario para registrar actividades.

Otros han alentado a los niños a expresar sus sentimientos a través de “tarjetas de emociones” con imágenes de niños que muestran diferentes expresiones faciales.

Mientras tanto, entre los alumnos de secundaria de los grados 11 y 13, los inspectores encontraron que era un desafío para los maestros ayudar a los alumnos a ponerse al día con el contenido que se habían perdido mientras los preparaban para los exámenes.

“En algunas escuelas, las prácticas de evaluación para estos grupos de años se han ajustado para dar cuenta de esto. Sin embargo, los inspectores señalaron que la posibilidad de que los alumnos sean ‘más evaluados que instruidos’ y el enfoque en la evaluación podría significar que el aprendizaje se vea afectado como resultado”, dijo el informe.

Las escuelas y guarderías informaron retrasos en el acceso a los servicios de apoyo del habla y el lenguaje o de salud mental. Las escuelas especiales informaron que se vieron particularmente afectadas por esto, ya que dependen de servicios externos más que otras escuelas.

James Bowen, director de políticas del sindicato de líderes escolares NAHT, señaló: “No sorprende que la pandemia haya tenido un gran impacto en algunos niños. Sabemos que los confinamientos repetidos han significado que la mayoría de los niños más pequeños han tenido una interacción social reducida y tal vez no sea sorprendente que esto haya afectado su desarrollo emocional, así como sus habilidades sociales y del habla y lenguaje”.

“Nos complace que el informe de Ofsted indique que las escuelas están ayudando efectivamente a los niños a recuperar estas habilidades perdidas”.

“Las escuelas trabajan increíblemente duro para brindar a los alumnos el apoyo adicional que necesitan, pero no pueden hacerlo solas: el gobierno también debe invertir en servicios para la primera infancia para familias desfavorecidas, así como en servicios vitales como la terapia del habla y el lenguaje, para que los niños que necesitan el apoyo de especialistas lo reciban lo antes posible”.

Un portavoz del Departamento de Educación dijo: “Nuestro ambicioso plan de recuperación continúa desarrollándose en todo el país, con casi £5 mil millones invertidos en tutoría de alta calidad, capacitación de clase mundial para maestros y profesionales de la primera infancia, financiamiento adicional para escuelas y extensión del tiempo en universidades por 40 horas al año”.

“Hemos simplificado el Programa Nacional de Tutoría para llegar a la mayor cantidad de alumnos posible, con fondos destinados directamente a las escuelas a partir del próximo año. La mayoría de las escuelas también utilizan el Programa de Intervención Temprana del Lenguaje de Nuffield para mejorar las habilidades lingüísticas de los niños en primero de primaria”.

Tras las preocupaciones planteadas en el informe sobre los niños que no pueden reconocer las expresiones faciales, Spielman dijo que la “crianza básica” es más importante que retrasar el ingreso de los niños a la escuela.

Cuando se le preguntó si los padres deberían retrasar el envío de sus hijos a la escuela, agregó: “Lo que es más importante, creo, es asegurarse de que estas cosas tan básicas [se estén haciendo]”.

“Los padres y las familias pueden pasar tiempo asegurándose de hablar mucho con sus hijos. Denles esas oportunidades de turnarse, si hay otros niños con quienes jugar, expónganlos a otros niños y garanticen que salgan, llévenlos al parque, salgan a caminar, salgan a hacer compras, hagan ejercicio”.

“Esas cosas realmente básicas de crianza son probablemente más fundamentales que retrasar su ingreso a la escuela”.