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El funeral de la reina Isabel II será la “mayor operación policial que el Reino Unido haya organizado jamás”

Agentes de policía de todo el Reino Unido acudirán a Londres en el marco de la Operación Puente de Londres

Lizzie Dearden
Domingo, 18 de septiembre de 2022 13:32 EDT
Los dolientes depositan flores y velas ante el Palacio de Buckingham en homenaje a la reina Isabel II

La operación policial para el funeral de la reina Isabel II podría ser la “mayor operación policial y de protección que el Reino Unido haya organizado jamás”, según declaraciones de un antiguo oficial de policía de alto rango mientras se alistan los preparativos.

Miles de agentes de policía estarán de servicio todos los días en la capital, mientras las multitudes se reúnen en el Palacio de Buckingham y en el cercano Green Park para presentar sus respetos, y el cuerpo policial instó a la gente a “permanecer atento”.

Durante varios días, el féretro de la reina permanecerá en exposición para rendir homenaje de cuerpo presente antes de su funeral, al que se espera que asistan el presidente de EE.UU., Joe Biden, y dignatarios de todo el mundo.

Nick Aldworth, que dirigió la vertiente de “proteger y preparar” de la policía nacional antiterrorista hasta su retiro en mayo de 2019, dijo que los actos se desarrollarán en un “mundo de amenazas muy diferente” al de las muertes de Diana, princesa de Gales, y de la Reina Madre.

“Tal vez esta será la mayor operación policial y de protección que el Reino Unido haya organizado jamás”, declaró a The Independent.

“Solo hace falta un auto, una persona que haga algo aborrecible y no solo habrás interrumpido un evento constitucional, sino que habrá personas heridas y muertas”.

Se produce meses después de que un hombre armado con una ballesta al parecer viajara al Castillo de Windsor y amenazara con matar a la reina.

En 2017, un simpatizante de Isis armado con una espada intentó un ataque terrorista en el Palacio de Buckingham, mientras que dos miembros de un grupo terrorista neonazi fueron encarcelados por incitar a ataques contra el príncipe Harry en 2019.

Owen West, un superintendente jefe retirado que se especializó en el orden público, señaló que la policía trabajaría para garantizar que el público pueda “expresar su dolor” de manera segura.

“Se centrará en torno al compromiso y el diálogo con los que están en la multitud, compartiendo información que pueda ayudarles, manteniendo las rutas esenciales libres”, explicó a The Independent.

“Las grandes multitudes, en estos días, representan una amenaza potencial de actos hostiles, por lo que tendremos atención especial en la evaluación de riesgos y las medidas para ayudar a proteger el cuerpo de una multitud contra ese potencial”.

Se han cerrado carreteras para formar barreras seguras alrededor de los lugares donde hay mucha gente, y se han colocado barreras y otras medidas de “mitigación de vehículos hostiles”.

Para el funeral de Estado de la reina, se pondrá en marcha un importante operativo armado, que incluirá francotiradores en las azoteas para vigilar la procesión y patrullas en tierra.

Scotland Yard declaró que ha puesto en marcha “planes policiales bien ensayados”, pero aún no confirma si recurrirá a agentes de otras partes del país para reforzar sus filas.

Un portavoz comentó que en los próximos días es casi seguro que se presenten solicitudes en el marco de los protocolos de “ayuda mutua”, y que el Centro de Coordinación de la Policía Nacional organizará los movimientos de los agentes, los días de descanso, las remuneraciones y las disposiciones para acoger a los agentes voluntarios.

Un agente de policía observa las flores depositadas ante el Palacio de Buckingham tras la muerte de la reina Isabel II el jueves
Un agente de policía observa las flores depositadas ante el Palacio de Buckingham tras la muerte de la reina Isabel II el jueves (PA)

“Durante la Operación Puente de Londres, se espera que la operación policial global dure entre 10 y 14 días, con el apoyo de las fuerzas de todo el Reino Unido, y utilizando múltiples capacidades policiales”, añadió un portavoz.

“Debido a la naturaleza de la Operación Puente de Londres, en la que participarán un gran número de dignatarios extranjeros y grandes multitudes, se recurrirá a una amplia gama de capacidades y especialidades policiales para ayudar en la operación de seguridad dirigida por la Policía Metropolitana”.

Los responsables policiales afirmaron que los cuerpos más afectados por el dispositivo tienen planes “desde hace tiempo” para hacer frente a la demanda adicional.

Un portavoz del Consejo Nacional de Jefes de Policía añadió: “Los cuerpos de policía cuentan con planes de continuidad de la actividad para garantizar que están preparados para ayudar en esta operación, además de seguir prestando su servicio principal al público, y mantener la seguridad de las comunidades”.

Los procedimientos intergubernamentales elaborados en un principio en la década de 1960 con el nombre de Operación Puente de Londres se han actualizado y revisado a lo largo de los años.

Aldworth dijo que había visto por primera vez la Operación Puente de Londres, que entonces era “una carpeta polvorienta en una estantería”, hace más de 20 años, y que las “metodologías de amenaza actuales” habían cambiado.

Y añadió que no tenía conocimiento de un acontecimiento comparable que hubiera tenido lugar desde que la principal amenaza terrorista para el Reino Unido pasó a ser la de los “actores solitarios”, que a menudo utilizan vehículos y cuchillos, en lugar de los atentados y las complejas tramas dirigidas por grupos terroristas.

El antiguo oficial superior de la Policía Metropolitana señaló que las multitudes representan un objetivo potencial, así como los asistentes de alto nivel a los actos conmemorativos.

Recordó que, mientras trabajaba en los Juegos Olímpicos de Londres de 2012, se puso en marcha la ayuda mutua para “traer a casi todos los agentes armados del país” para vigilar a las personalidades internacionales debido a la escasez de agentes de protección.

Aldworth indicó que, a pesar de la expectativa de que los asistentes sean dolientes bien intencionados, en las multitudes apretadas la policía “no tiene la posibilidad de diferenciar entre las personas” que se acercan demasiado al cortejo fúnebre o a los dignatarios.

Antes del funeral, los agentes están apostados en lugares clave, como las principales estaciones de ferrocarril, los parques reales y los exteriores de las residencias reales de Londres.

Como parte de las medidas de seguridad, se están cerrando las carreteras alrededor del Palacio de Buckingham y de las zonas más concurridas, y se ha pedido al público que permanezca atento.

El subcomisario Stuart Cundy subrayó: “Este será un momento extremadamente conmovedor para la nación, y sé que la gente querrá presentar sus respetos y celebrar la dedicación de la reina al servicio público”.

“En estrecha colaboración con la policía de la ciudad de Londres y la policía de transportes británica, la policía metropolitana coordinará y desplegará un amplio plan policial en Londres. Esta operación será muy visible, en particular en Westminster y en las zonas que rodean el Palacio de Buckingham y St James’s Park”.

“Un gran número de agentes estarán de servicio durante este periodo, para garantizar la seguridad de quienes visiten Londres y para disuadir cualquier posible acto delictivo”.

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