Restos de superyate hundido son llevados a puerto siciliano tras ser levantados del agua
Un superyate de lujo de bandera británica que se hundió frente a Sicilia el año pasado, causando la muerte del magnate tecnológico del Reino Unido Mike Lynch y seis personas más, comenzó su viaje final hacia el puerto siciliano de Termini Imerese el domingo, un día después de que los equipos de recuperación completaran la compleja operación para llevarlo a tierra.
La parte superior blanca y el casco azul del Bayesian de 56 metros (184 pies), cubiertos de algas y barro, se mantuvieron elevados por la barcaza grúa frente al puerto de Porticello, antes de comenzar su traslado a Termini Imerese, donde esperaba una cuna especial de acero.
La embarcación será entregada a los investigadores para exámenes adicionales que ayuden a determinar la causa del hundimiento.
El Bayesian se hundió el 19 de agosto frente a Porticello, cerca de Palermo, durante una violenta tormenta mientras Lynch agasajaba a amigos con un crucero para celebrar su absolución dos meses antes en Estados Unidos de cargos de fraude. Lynch, su hija y cinco personas más murieron. Quince personas sobrevivieron, incluido el capitán y todos los miembros de la tripulación, excepto el chef.
Las autoridades italianas están llevando a cabo una investigación criminal.
La embarcación fue lentamente levantada del lecho marino a 50 metros (165 pies) de profundidad durante tres días para permitir que las correas de elevación de acero, eslingas y arneses se aseguraran bajo la quilla.
El Bayesian carece de su mástil de 72 metros (236 pies), que fue cortado y dejado en el lecho marino para su futura remoción. El mástil tuvo que ser desprendido para permitir que el casco se colocara en una posición casi vertical que permitiera elevar la embarcación.
Los investigadores británicos dijeron en un informe provisional emitido el mes pasado que el yate fue volcado por un "viento extremo" y no pudo recuperarse.
El informe indicó que la tripulación del Bayesian había elegido el sitio donde se hundió para refugiarse de unas tormentas pronosticadas. Las velocidades del viento superaron los 70 nudos (81 mph) en el momento del hundimiento y "violentamente" volcaron la embarcación a un ángulo de 90 grados en menos de 15 segundos.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.