Inundaciones provocan que “lago fantasma” de California crezca casi tanto como el lago Tahoe
El lago sigue creciendo y las autoridades estatales del agua esperan que alcance su punto máximo a finales de mayo o principios de junio
El invierno particularmente tormentoso de California rejuveneció un lago muerto hace mucho tiempo.
El lago Tulare, a menos de una hora en automóvil desde el centro de Fresno, fue en un momento dado el mayor cuerpo de agua dulce al oeste del Mississippi.
Los colonos y agricultores que vivían en la región utilizaban sus aguas para riego y consumo. A principios de 1900, el lago se agotó y dejó un lecho polvoriento.
Ahora, aproximadamente 120 años después, la escorrentía de una serie de tormentas invernales masivas que azotaron California regresó la vida al lago y lo expandió a más de 180 millas cuadradas (466 km2), o aproximadamente del tamaño del lago Tahoe.
Si bien una afluencia de agua suele ser una bendición para el estado a menudo azotado por sequía, la ampliación del lago Tulare ha sido indiscriminada al recuperar su antiguo dominio, sin prestar atención a las casas y campos que los residentes construyeron allí en su ausencia.
Las fotos de la ciudad cercana Corcoran y la cuenca circundante muestran el alcance de la recuperación del lago: techos y copas de árboles que sobresalen justo por encima de la línea de flotación, tractores y autos medio sumergidos y ruedas probablemente hundidas en el lecho fangoso. En algunas áreas, los caminos simplemente desaparecen en el agua.
Es probable que las imágenes del avance del agua solo se vuelvan más impactantes, ya que el lago sigue creciendo. La escorrentía de la nieve arrojada por la avalancha de ríos atmosféricos podría expandir el lago hasta 260 millas cuadradas (673 km2), según el Fresno Bee, citando a la Oficina de Servicios de Emergencia de California y al Departamento de Recursos Hídricos del estado.
Los funcionarios del Departamento de Recursos Hídricos estimaron que, para finales de mayo, el agua del lago Tulare se acercará a o superará los 620.000 acres-pie. Para el pico del crecimiento del lago, probablemente a finales de mayo o mediados de julio, los funcionarios estiman que existe un 50% de posibilidades de que el lago alcance aproximadamente 700.000 acres-pie y un 10% de posibilidades de que se expanda a 931.000 acres-pie.
Un acre-pie equivale a 326.000 galones de agua, o lo suficiente para cubrir un acre completo de agua en un pie de agua. Es probable que el lago Tulare supere las capacidades de almacenamiento de agua del lago Arrowhead (aproximadamente 228.000 acres-pie), el lago Kaweah y el lago Success, con capacidades de 185.000 acres-pie y 82.000 acres-pie, respectivamente.
California está lidiando al mismo tiempo con una sobreabundancia de agua en algunas regiones y sequía en otras. Los funcionarios estatales de agua esperan que la situación en el lago Tulare les brinde un medio para que un problema les ayude a resolver otro al desviar las aguas de la inundación hacia el acueducto de California.
“Hay varios esfuerzos simultáneos en marcha… para distribuir el agua y, en última instancia, proteger a las comunidades en el Valle Central”, Brian Ferguson, portavoz de la Oficina de Servicios de Emergencia del estado, le dijo al Fresno Bee. “Estamos muchísimo mejor que hace varias semanas. No estamos pronosticando daños tan severos como quizás lo hicimos hace varias semanas”.
Señaló que el hecho de que se estuvieran realizando esfuerzos de mitigación no significa que la expansión del lago Tulare estará libre de peligro para los habitantes de la región.
“Aunque quizás se pudo haber evitado el riesgo más grave, quedamos con la incógnita con respecto a qué tan rápido baja el agua de la montaña, qué dique puede albergar ardillas de las que no somos conscientes o un millón de otras cosas que no necesariamente controlamos como seres humanos”, observó.
Traducción de Michelle Padilla