Renuncia otro miembro del personal de Matt Gaetz y aumenta la presión sobre el congresista republicano

Un segundo miembro del personal renunció a la oficina del republicano Matt Gaetz, a medida que aumenta la presión sobre el congresista luego de una investigación sobre las acusaciones de tráfico sexual contra el representante de Florida.

Devin Murphy, el director legislativo de la oficina de Gaetz, renunció a su cargo el jueves, en una medida que fue reportada por primera vez por The New York Times.

Una fuente cercana a Murphy le dijo a CNN que no dejó el trabajo específicamente debido a las acusaciones dirigidas a Gaetz, pero lo hizo porque el "circo mediático" que lo rodeaba dificultaba la realización de un "trabajo significativo en el Congreso".

El exdirector de comunicaciones de Gaetz, Luke Ball, renunció a su cargo en la oficina la semana pasada después de que se revelaran las acusaciones y la investigación.

Una declaración de la oficina del Congreso de Gaetz la semana pasada dijo que “la oficina del congresista Matt Gaetz y Luke Ball han acordado que sería mejor separarse. Le agradecemos su tiempo en nuestra oficina y le deseamos lo mejor en el futuro".

Gaetz está siendo investigado actualmente por el Departamento de Justicia (DOJ) por una relación que supuestamente tuvo con una niña de 17 años, incluidas las acusaciones de que violó las leyes federales de tráfico sexual al supuestamente pagar para que la niña viajara con él.

Según los informes, la investigación sobre el congresista, un aliado cercano del expresidente Donald Trump, es parte de una investigación más amplia sobre Joel Greenberg, un funcionario de Florida que fue acusado el verano pasado por cargos de tráfico sexual infantil.

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Greenberg enfrenta 14 cargos, incluidas acusaciones de acoso a un oponente político, uso de una base de datos estatal para crear identificaciones falsas y tráfico sexual de un menor. Se enfrenta a un juicio en junio.

Gaetz, que no ha sido acusado de ningún delito, ha negado las acusaciones. Dice que es parte de un complot de extorsión para defraudar $25 millones (£18,1 millones) a su familia.

En una columna publicada en el Washington Examiner el lunes, Gaetz dijo que las acusaciones intentaban sensacionalizar su vida sexual, ya que una vez más negó las afirmaciones.

“Primero, nunca, nunca he pagado por sexo. Y segundo, yo, como hombre adulto, no me he acostado con nadie de 17 años”, dijo. "Mi estilo de vida de antaño puede ser diferente de cómo vivo ahora, pero no era ni es ilegal", agregó Gaetz.

La presión ha ido creciendo contra el congresista de Florida en los últimos días, y el representante Adam Kinzinger de Illinois se convirtió el jueves en el primer republicano en pedir su renuncia, escribiendo en un breve tweet: "Matt Gaetz debe renunciar".

Mientras que hace dos semanas, el representante demócrata Ted Lieu pidió que se retirara a Gaetz del Comité Judicial de la Cámara durante la investigación sobre las acusaciones. En el momento de escribir este artículo, permanece en el comité.

Aunque dos empleados ya abandonaron su oficina, Gaetz recibió el jueves el apoyo de ocho miembros del personal femenino, que el congresista publicó en un hilo de Twitter.

Las mujeres escribieron en el comunicado que “en ningún momento ninguna de nosotras ha experimentado o presenciado nada menos que la máxima profesionalidad y respeto. Sin indicio de incorrección. Ni una pizca de falsedad".

Si bien su apoyo incondicional rechazó "uniformemente" las afirmaciones como falsas, la declaración conjunta permaneció en el anonimato más allá de la firma colectiva de "nosotras, las mujeres de la oficina del congresista Matt Gaetz".

The Independent se ha puesto en contacto con la oficina de Gaetz para solicitar comentarios.