Marjorie Taylor Greene no dirá si ha sido vacunada

La congresista Marjorie Taylor Greene ha sido muy franca en sus críticas tanto de la vacuna contra el coronavirus y los diversos esfuerzos de las autoridades gubernamentales de Estados Unidos y locales han tomado para frenar la propagación del virus, pero ella se niega a comentar sobre si sí o no se ha recibido el piquete ella misma.

Cuando se le preguntó a principios de esta semana si había sido vacunada, Greene eludió la pregunta, diciendo incorrectamente que el reportero que hacía la investigación estaba violando sus derechos HIPPA.

HIPPA es una ley de 1996 que garantiza que los derechos de los pacientes estén protegidos y su información médica no puedan ser revelada por los profesionales de la salud. Evita que los hospitales vendan datos específicos de pacientes a cualquier número de partes potencialmente interesadas, como anunciantes o empresas de personal. Esta ley está destinada a proteger la privacidad del paciente y prevenir la discriminación contra las personas que tienen problemas de salud.

Sin embargo, HIPAA solo se aplica a los profesionales de la salud que manejan datos de pacientes. No prohíbe que nadie pregunte a otra persona sobre su historial médico. Greene puede optar por no responder la pregunta, pero de ninguna manera es una violación de HIPPA preguntarle si ha sido vacunada.

Durante el mismo intercambio, Greene se río cuando se le preguntó si sentía alguna responsabilidad por mantener a los georgianos a salvo del coronavirus.

Su respuesta se produce justo después de que un niño de cinco años que vivía en su distrito muriera de un derrame cerebral resultante de Covid-19.

Greene fue suspendida recientemente de Twitter por promover información errónea sobre el virus en su cuenta.

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La congresista afirmó que Covid-19, no era peligroso para personas menores de 65 años y no obesas. Esa afirmación es incorrecta, ya que numerosos trabajadores de la salud han informado de personas jóvenes, sanas que sufren y mueren a causa del virus.

Se le bloqueó el acceso a su cuenta durante 12 horas después de hacer la publicación. Muchos de los tweets de Greene han sido marcados con advertencias que dicen que la información contenida era "falsa o engañosa".

Anteriormente se enfrentó a críticas después de comparar los mandatos del uso de cubrebocas en torno al coronavirus con el Holocausto, lo que resultó en que se disculpara públicamente luego de una visita privada al museo del Holocausto de Washington, DC.

Greene ha sido excluida de Twitter en el pasado por repetir teorías de conspiración desacreditadas con respecto a las elecciones al Senado en Georgia.