Marina Ovsiannikova, la mujer que en 5 minutos desafió a Vladimir Putin en televisión nacional
La empleada de una de las cadenas de televisión rusa más importantes desafió la ley con una protesta en pleno noticiero en vivo
Hace unos días el vídeo de una mujer irrumpiendo en un noticiero ruso con una pancarta para protestar por la guerra recorrió el mundo a través de las redes sociales. Poco después se supo que se trataba de Marina Ovsiannikova, una empleada de la cadena televisiva, de padre ucraniano y madre rusa, quien explicó que se encontraba apenada por permitir que se difundieran mentiras a través de la televisión.
“Guardamos silencio en 2014 cuando todo empezó. Hemos estado viendo en silencio a este régimen antihumano y ahora todo el mundo nos ha dado la espalda. Diez generaciones de nuestros descendientes no van a poder limpiarse la vergüenza de esta guerra fratricida. Tomen las calles, no tengan miedo, no nos pueden meter a todos a la cárcel”, dice en un vídeo que grabó antes de irrumpir en el estudio de televisión.
Marina fue detenida, como todos los que actualmente protestan en contra de la invasión rusa en Ucrania, y fue multada con 30.000 rublos (unos 275 dólares) y fue liberada para enfrentar los cargos penales que se le imputan por lo que sí podría ser condenada a prisión.
El pasado 14 de marzo, Marina se colocó detrás de la conductora Ekaterina Andreeva, en el foro del Canal 1, con una cartulina que decía “No a la guerra. Detengamos la guerra. No crean en la propaganda, les están mintiendo”, con unas banderas de Ucrania y Rusia. Aunque la intervención duró apenas unos minutos antes de que la transmisión se cortara, el vídeo se hizo viral prácticamente de inmediato.
El gobierno de Rusia ha prohibido las manifestaciones y toda protesta, aunque sea mostrando una cartulina en blanco, es detenida por elementos de policía, pues “desacreditar a las fuerzas armadas rusas” es un delito. Por su parte, los medios de aquel país también tienen prohibido mencionar el término “invasión”, ya que Putin lo ha nombrado como “operación militar especial” u “operación de desmilitarización”, bajo el argumento de que el gobierno de Ucrania planea “reprimir” a los ciudadanos pro rusos y “eliminarlos”.