¿Qué es el blackfishing y por qué se acusa a Jesy Nelson de ello?
La excantante de Little Mix, Jesy Nelson, fue acusada de blackfishing esta semana, pero ¿qué significa?
Si has estado siguiendo el mundo de los famosos esta semana, probablemente te habrás dado cuenta de que la excantante de Little Mix, Jesy Nelson, ha sido acusada de algo llamado “blackfishing”.
El término fue acuñado por la periodista Wanna Thompson en 2018 y se utiliza para describir a alguien acusado de fingir ser negro en las redes sociales utilizando maquillaje, productos para el cabello y, en algunos casos, cirugía para cambiar drásticamente su apariencia.
Nelson, de 30 años, fue acusada de blackfishing después de lanzar su sencillo de debut “Boyz” con Nicki Minaj a principios de esta semana. En el video musical, se ve a Nelson muy bronceada y con el pelo peinado con pelucas y trenzas.
La cantante comentó después en Instagram las afirmaciones, y atribuyó su bronceado a unas recientes vacaciones en Antigua. Añadió: “Personalmente, quiero decir que mi intención nunca fue ofender a la gente de color con este video y mi canción porque, como dije, al crecer como una niña, ésta es la música que escuchaba”.
“Éstos son los videos que veía y pensaba que eran los mejores. Para mí, personalmente, el hip hop y el R&B de los años 90 fue la mejor época de la música. Quería celebrarlo. Quería celebrar esa época de la música porque es lo que me gusta.”
Nelson no es la primera celebridad que es acusada de blackfishing. Rita Ora fue acusada del término el año pasado cuando se peinó con trenzas de caja y Kim Kardashian fue acusada de usar maquillaje para oscurecer dramáticamente su piel en 2017.
El blackfishing como frase cobró fuerza por primera vez en noviembre de 2018, cuando un hilo de Twitter en el que se pedía a la gente que publicara “todas las chicas blancas haciendo cosplay de mujeres negras en Instagram” se hizo viral, cosechando más de 23.000 retweets y miles de respuestas criticando a los influencers por hacerlo.
Los colaboradores del foro publicaron una serie de fotos del antes y el después que muestran claras discrepancias en los tonos de piel de ciertos usuarios de Instagram.
A menudo se ha visto que quienes practican el blackfishing eligen la estética que consideran estereotipada de las mujeres negras y la aprovechan para conseguir lucrativos contratos de patrocinio a los que las mujeres de color no tendrían acceso de otro modo.
Algunas influencers han sido acusadas por los usuarios de Twitter de manipular sus fotografías o de someterse a la cirugía plástica para cambiar la apariencia de sus rasgos para que parezcan tener labios más gruesos y figuras más curvas.
Los críticos de esta tendencia la describen como una forma de apropiación cultural, por la que los elementos de una cultura minoritaria son adoptados por los de una cultura más dominante sin acreditar su origen, lo que hace que los miembros de la cultura minoritaria se sientan oprimidos y marginados.
En declaraciones a The Independent, la escritora Stephanie Yeboah describe el blackfishing como un “tipo de blackface”, la práctica profundamente ofensiva por la que los blancos oscurecen su tono de piel con maquillaje como forma de disfraz.
“Lo que estamos viendo -especialmente en las redes sociales- es otra forma de que las mujeres blancas coopten, se beneficien y se apropien de otra raza, y las marcas lo están fomentando”, afirma.
“Muchas de estas mujeres reciben el respaldo de las marcas de belleza y moda basándose en la ‘estética negra’, pero por desgracia, cuando se trata de utilizar a mujeres negras reales para las campañas, a menudo se nos deja de lado y se nos olvida.”
Wanna Thompson, la escritora independiente que inició el debate viral de Twitter, ha explicado por qué el blackfishing es tan “preocupante”, describiendo a las mujeres blancas que lo hacen como “mojar el pie en el estanque sin mojarse del todo”.