Elon Musk acosó a empleadas de SpaceX, revela nueva investigación del 'Wall Street Journal'

Hace un par de años, el fundador de SpaceX supuestamente le mostró su pene erecto a una azafata de la misma empresa antes de hacerle una insólita propuesta: le ofreció un caballo a cambio de un masaje erótico. Según los informes, la compañía pagó a la mujer USD 250.000 para enterrar la denuncia de acoso sexual.

En 2022, Musk negó la acusación y declaró a Business Insider (que informó por primera vez del incidente): “Si yo acostumbrara a acosar a las mujeres, es poco probable que esa conducta solo saliera a la luz ahora, después de una trayectoria profesional de 30 años”.

Irónicamente, dos años más tarde, denunciaron a Musk por conducta inapropiada en el trabajo.

The Wall Street Journal consultó a más de 48 fuentes, además de revisar correos electrónicos, mensajes de texto y otros documentos. Según el informe que realizó dicho medio, el multimillonario mantuvo relaciones íntimas con varias empleadas de SpaceX y presionó a otras para obtener favores sexuales.

Los presuntos encuentros sexuales de Musk con sus empleadas, además de las insinuaciones que les hizo, son impactantes.

Musk, que tiene 11 hijos, habría pedido en más de una ocasión a una empleada de SpaceX que tuviera sus bebés, informó The Wall Street Journal . Ella declinó la oferta, y siguió en su puesto. Sin embargo, parece que Musk se negó a subirle el sueldo y se quejó de su trabajo. La mujer abandonó la empresa en 2013. Recibió una indemnización en efectivo y acciones valorada en más de un millón de dólares.

Por otra parte, The Wall Street Journal informó que Musk supuestamente mantuvo relaciones sexuales con una estudiante universitaria que hizo una pasantía en SpaceX durante un verano a principios de la década de 2010. La estudiante de ingeniería trabajó junto con el fundador y le proponía ideas para mejorar la empresa. Musk era más de 20 años mayor que ella.

Un año después de la pasantía, el multimillonario la llevó en avión a Sicilia. Primero viajaron juntos en primera clase a Londres, seguido de un viaje en jet privado a la isla italiana, donde Musk asistió a una conferencia patrocinada por Google. La relación terminó después de este viaje.

Sin embargo, en 2017, Musk se puso en contacto nuevamente con la exempleada para ofrecerle un puesto en su equipo ejecutivo. Según el informe en The Wall Street Journal , ella aceptó el trabajo y se trasladó de Nueva York a California.

Si bien su relación había terminado, Musk la invitó a tomar algo cuando llegó a California. Al parecer, durante esa cita, Musk se le insinuó y le tocó el pecho.

El medio obtuvo declaraciones juradas firmadas por la mujer en las cuales aclaró que no tenía una relación con Musk mientras trabajaba en SpaceX de 2017 a 2019. Ella escribió: “Elon intentó reanudar nuestra relación antes de que me contratara, pero yo no quise retomar lo nuestro. Si bien fue un poco incómodo al principio, todo seguía más o menos normal”.

Sin embargo, las conversaciones que la mujer tenía con amigos parecían revelar una historia diferente. En efecto, tenían la impresión de que la mujer no disfrutaba de su tiempo en SpaceX. Por ejemplo, a veces se escondía en el baño de la empresa, sufría el “síndrome del impostor”, y sentía que sus colegas se negaron a tomar en serio sus ideas.

Al parecer, Musk le acosaba a la empleada y le enviaba mensajes de texto con frecuencia para invitarle a su mansión.

En una ocasión, ella no le contestó, y él le envió tres mensajes más antes de escribirle: “Bueno, tal vez sea mejor que no nos veamos más”. A la mañana siguiente, la mujer le mandó un mensaje a Musk disculpándose por no haberle contestado y le explicó se había quedado dormida.

Los abogados de la mujer declararon a The Wall Street Journal que cuando Musk dijo que sería mejor que no se vieran más, no se refería a su deseo de terminar “una relación romántica”.

Sin embargo, un amigo de la mujer declaró a The Wall Street Journal que ella tenía ansiedad relacionada con “el síndrome del impostor”, lo que hacía que su trabajo le resultara difícil. Además, el “comportamiento de Elon” le ponía aún más ansiosa.

Finalmente, la mujer pidió salir del equipo ejecutivo de Musk y pasar a desempeñar otro papel en la empresa. Contó a sus amigos que se sentía incómoda al tener que trabajar con el fundador de la empresa y en 2019, dejó la compañía.

Según la misma investigación, en 2014, Musk mantuvo relaciones sexuales durante un mes con otra mujer con la cual trabajaba directamente.

Gwynne Shotwell, presidenta y directora de operaciones de SpaceX, declaró a The Wall Street Journal que el informe estaba “infundado”, “completamente engañoso” y “plagado de información errónea y falsedades”.

Luego, defendió al magnate: “Elon es una de las mejores personas que conozco”.

A continuación, Shotwell explicó al citado medio que la empresa estaba investigando todas las denuncias de acoso sexual y que tomaría las medidas oportunas.

The Independent ha entrado en contacto con SpaceX en busca de comentarios.

Traducción de Anna McDonnell