Farmacéutico conspirador de COVID encarcelado durante tres años por destruir 500 vacunas
Steven Brandenburg creía que la vacuna tenía un microchip y haría que las personas fueran infértiles
Un farmacéutico de la conspiración COVID-19 ha sido encarcelado durante tres años por sabotear 500 vacunas en un hospital.
Steven Brandenburg dijo a los investigadores que había creído que las vacunas tenían microchip y que los destinatarios eran infértiles.
Brandenburg se declaró culpable de alterar cientos de dosis de la vacuna Moderna COVID-19 en el Centro Médico Aurora en Grafton, Wisconsin, en diciembre pasado.
En un acuerdo de culpabilidad firmado, admitió creer en una serie de teorías de conspiración, que incluyen que la Tierra es plana y que se escenifica el ataque del 11 de septiembre.
Y los documentos judiciales declararon que Brandenburg ha comunicado sus creencias y "nociones de historia alternativa" a sus compañeros de trabajo durante al menos dos años antes del incidente.
Los fiscales federales lo acusaron de ignorar imprudentemente el riesgo que representa para otra persona manipular las vacunas, que sacó de la cámara frigorífica durante dos turnos.
Brandenburg admitió en las presentaciones judiciales que sabía que sacar las vacunas del almacenamiento en frío podría hacerlas menos efectivas o peligrosas.
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Además de la pena de prisión de tres años, deberá cumplir tres años de libertad supervisada.
Los fiscales citaron su creencia en las teorías de la conspiración como una razón por la que debería ser puesto bajo custodia de inmediato.
Pero el juez Brett Ludwig no estuvo de acuerdo y dijo que Brandenburg no tiene antecedentes penales.
El abogado de Brandenburg le dijo a la corte que su cliente había estado pasando por un divorcio estresante en el momento del incidente.
Cuando se le preguntó inicialmente después de que se descubrieron los viales extraviados el 26 de diciembre, Brandenburg dijo a las autoridades que fue un error inadvertido.
Pero durante una revisión adicional, más tarde admitió que había quitado intencionalmente la vacuna de la unidad de refrigeración de un hospital.
Moderna le dijo al hospital después del incidente que cualquier persona inyectada con la vacuna en mal estado no corría ningún peligro, aparte de no estar protegido contra el virus.
Brandenburg también ha sido acusado en la corte del condado de Ozaukee por intento de daño criminal a la propiedad, del cual se declaró inocente.
Como parte de ese caso, entregó ocho armas de fuego a los ayudantes del alguacil.