Darnella Frazier, la adolescente que filmó el asesinato de George Floyd, recibió el premio Pulitzer

Darnella Frazier, una adolescente que filmó el asesinato de George Floyd en un vídeo transmitido en directo que se difundió rápidamente por todo el mundo, fue galardonada el viernes con el Premio Pulitzer.

Muchos sostienen que, sin las claras pruebas en vídeo de lo que ocurrió aquel 25 de mayo de 2020, las protestas que siguieron a la muerte de Floyd a manos de la policía de Minneapolis no se habrían producido. Pasaron meses antes de que las autoridades hicieran públicas las imágenes completas de las cámaras corporales de la policía sobre lo sucedido.

El comité del premio dijo en un comunicado que había decidido rendir homenaje a Frazier, que tenía 17 años cuando grabó el ahora famoso vídeo, por “informar valientemente del asesinato de George Floyd, un vídeo que estimuló las protestas contra la brutalidad policial en todo el mundo, destacando el papel crucial de los ciudadanos en la búsqueda de la verdad y la justicia por parte de los periodistas”.

El vídeo del incidente captó de cerca la brutalidad e insensibilidad del asesinato de Floyd. El hombre desarmado dijo a los agentes que no podía respirar 27 veces antes de desmayarse y luego morir bajo sus rodillas, mientras un policía cercano bromeaba diciendo: “Por eso no hay que drogarse, chicos”.

Y el vídeo mostró con toda crudeza lo incompletos y a menudo totalmente engañosos que suelen ser los primeros informes policiales al público en las muertes de hombres negros.

En el boletín policial original que se envió al público, así es como el departamento de policía de Minneapolis clasificó el espantoso asesinato que millones de personas verían más tarde en el vídeo de Frazier en las redes sociales:

“Se le ordenó salir de su coche. Después de salir, se resistió físicamente a los agentes. Los agentes lograron esposar al sospechoso y observaron que parecía estar sufriendo problemas médicos. Los agentes llamaron a una ambulancia. Fue trasladado en ambulancia al Centro Médico del Condado de Hennepin, donde murió poco después”.

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Esto dista mucho de la imagen del incidente que describen los testigos, donde los agentes ignoraron su formación y realizaron una maniobra peligrosa con un hombre desarmado en medio de un episodio de ansiedad.

Durante el juicio por asesinato de Derek Chauvin, el expolicía de Minneapolis que se arrodilló sobre el cuello de Floyd, Frazier testificó sobre el impacto duradero que tuvo en ella la filmación del asesinato.

“Han sido noches en las que me he quedado despierta pidiendo perdón y disculpándome con George Floyd por no haber hecho más y no haber interactuado físicamente y no haberle salvado la vida”, aseguró Frazier. “Pero no es lo que debería haber hecho yo, sino lo que debería haber hecho él”, en referencia a Chauvin.

Añadió que al ver cómo se desarrollaba el acontecimiento, no pudo evitar pensar en los hombres negros de su propia familia.

“Cuando miro a George Floyd, miro a mi padre, miro a mis hermanos, miro a mis primos, mis tíos, porque todos son negros”, testificó Frazier. “Tengo un padre negro. Tengo un hermano negro. Tengo amigos negros”.