Casa Blanca de Biden vuelve a negar el privilegio ejecutivo a Trump por los documentos del 6 de enero

El gobierno de Biden negó de nuevo a hacer valer el privilegio ejecutivo para los documentos adicionales que el expresidente Donald Trump quería bloquear del comité selecto que investiga la insurrección del 6 de enero en el Capitolio.

La consejera de la Casa Blanca, Dana Remus, dijo al archivero nacional David Ferriero en una carta obtenida por la CNN que el presidente Joe Biden no haría valer el privilegio que su predecesor pidió que permaneciera en secreto.

“El presidente Biden ha considerado la afirmación del expresidente y he realizado consultas con la Oficina de Asesoría Jurídica del Departamento de Justicia”, escribió Remus.

Trump presentó una demanda contra el comité selecto que investiga el 6 de enero de la semana pasada, culpando específicamente a la administración de Biden por no hacer valer el privilegio ejecutivo en nombre del expresidente. A menos que Trump reciba una orden judicial, los Archivos Nacionales deben comenzar a entregar los documentos al comité el 12 de noviembre.

“El presidente Biden ha determinado que una afirmación del privilegio ejecutivo no es en el mejor interés de los Estados Unidos, y por lo tanto no se justifica, en cuanto a los documentos proporcionados a la Casa Blanca el 16 de septiembre de 2021 y el 23 de septiembre de 2021. En consecuencia, el presidente Biden no apoya la afirmación de privilegio del expresidente”, continúa la carta.

Remus se refirió específicamente a una carta anterior en la que describía los “extraordinarios acontecimientos” del motín y decía a los Archivos Nacionales que empezaran a entregar los documentos en un plazo de 30 días “a falta de cualquier orden judicial intermedia”.

La carta llega después de que la Casa Blanca se negara previamente a hacer valer el primer lote de documentos solicitados por el Comité del 6 de enero.

La semana pasada, la Cámara de Representantes votó a favor de declarar al exasesor de la Casa Blanca, Steve Bannon, de desacato al Congreso después de que Bannon se negara a cumplir con una citación para declarar ante el comité después de que el abogado de Trump le dijera a él y a otros exasesores de Trump que la información está protegida por el privilegio ejecutivo.

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Esto se produjo a pesar del hecho de que Bannon no trabajaba en la administración en ese momento y sólo el actual presidente puede invocar el privilegio ejecutivo.