Califican de “cruel e insuficiente” el plan migratorio de EE.UU. para venezolanos

La nueva política migratoria anunciada por Estados Unidos para permitir el ingreso de 24 mil venezolanos que cumplan ciertas condiciones, entre ellas que lleguen por avión, y expulsar a México a quienes crucen por vía terrestre bajo la implementación del Título 42  ha generado arduas críticas entre los miembros de esa comunidad.

Henrique Capriles, quien ha sido dos veces candidato presidencial en Venezuela y es uno de los más severos opositores al liderazgo de Nicolás Maduro, manifestó en un tuit su desacuerdo con el plan de Washington. “El gobierno de EE.UU. anunció una política migratoria cruel que hará más dolorosa la situación de miles de venezolanos”.

Por su parte, Carlos Vecchio, el representante oficial de la oposición venezolana en Washington, también expresó en un tuit que el plan era “insuficiente para la magnitud de la crisis migratoria que hay en Venezuela’’. Y agregó que es necesario que la Casa Blanca reconsidere esta política.

Organizaciones humanitarias como MSF (Médicos sin Fronteras) se sumaron a las voces de descontento, sobre todo en lo que se refiere a la implementación del Título 42, que es una política puesta en vigor durante el gobierno de Donald Trump para deportar de manera automática a quienes soliciten asilo en la frontera, bajo el argumento de que pueden esparcir el virus del covid-19. Dado que la pandemia está bajo control, las autoridades sanitarias de Estados Unidos han recomendado que se elimine esa política.

“Estamos escandalizados por la decisión de la administración Biden de empezar a expulsar venezolanos bajo el Título 42, una política cruel e inhumana que no tiene bases para salvaguardar la salud pública  y debió haberse cancelado desde hace mucho tiempo”, dijo Avril Benoit, directora ejecutiva de MSF en un comunicado.

Activistas a favor de los derechos de los inmigrantes también han declarado que quienes llegan a la frontera en busca de asilo deben tener derecho a una audiencia con un juez de migración, antes de ser devueltos a México. Este país ha aceptado, bajo el nuevo acuerdo, recibir a los ciudadanos de Venezuela expulsados por la administración Biden.

Para miles de venezolanos que han llegado hasta la frontera entre México y Estados Unidos después de sortear enormes obstáculos, entre ellos atravesar zonas inhóspitas como la selva del Darién en Panamá, la noticia sobre el nuevo plan migratorio es devastadora.

En varios campamentos donde permanecen hacinados, se han generado protestas airadas porque dicen que esta política los deja sin opciones debido a que solo favorecerá a unos cuantos afortunados que puedan costear un viaje por avión y tengan patrocinadores que los apoyen económicamente en Estados Unidos.

Al anunciar su plan migratorio para los venezolanos, la Casa Blanca aseguró que la intención es disuadir la migración irregular y permitir la entrada legal de aquellos que sean elegibles.

Pero es claro que el tope de 24 mil personas a las que se dará visa es insuficiente. Venezuela atraviesa por la más grave crisis migratoria de su historia. Las cifras más recientes de la ONU (Organización de las Naciones Unidas) estiman que más de siete millones viven fuera de su país debido a los enormes problemas económicos y políticos que aquejan a la nación sudamericana.

La mayoría se ha refugiado en países vecinos de Sudamérica. Alrededor de 2.5 millones viven en Colombia. Y en los últimos dos años, un número creciente se ha desplazado hacia el norte, con la esperanza de encontrar asilo en la Unión Americana. Esto ha creado un flujo migratorio de venezolanos que no tiene precedentes en la frontera entre Estados Unidos y México.

De acuerdo con cifras del DHS (Departamento de Seguridad Interna), el promedio mensual de encuentros únicos de ciudadanos venezolanos en la frontera terrestre en el año fiscal 2022 totalizó 15.494 y aumentó a más de 25 mil en agosto y a 33 mil en septiembre. Estas cifras son muy altas si se comparan con el promedio mensual de 127 encuentros únicos que se registraron en los años fiscales comprendidos entre 2014 y 2019.

El DHS subraya que los encuentros únicos de ciudadanos venezolanos aumentaron un 293 por ciento entre los años fiscales 2021 y 2022, mientras que los encuentros únicos de todas las demás nacionalidades combinadas aumentaron 45 por ciento. Y agregó que, todos los días, más de 3 mil personas, en su mayoría venezolanos, cruzan a Panamá desde Colombia a través de la peligrosa selva del Darién.

Los analistas consideran que, pese a las críticas que ha generado su plan migratorio para los venezolanos, difícilmente el presidente Biden cambiará su postura por dos razones fundamentales: la primera es que su administración no tiene los recursos suficientes para administrar los casos de todos los migrantes que llegan a pedir asilo. Y la segunda es que tiene que enfrentar los ataques de los republicanos que lo acusan de haber abierto las fronteras del país, una acusación grave en época electoral.

Muzaffar Chishti, director de la oficina del Instituto de Política Migratoria de la Universidad de Nueva York, dijo en una entrevista con la BBC, que la crisis en la frontera ha sido muy bien aprovechada por los republicanos ante la proximidad de las elecciones.

A juicio de Chishti, aunque Biden no quería aplicar el Título 42 se vio forzado a ello para minimizar los ataques de que ha dejado abiertas las fronteras del país. “El presidente pensó que tenía que responder y demostrar que estaba tomando alguna medida, para al menos crear la impresión de que cuenta con un plan para lidiar con la crisis”.