Solicitantes de asilo se ven obligados a dormir en habitaciones de albergue de 24 camas pese a riesgo de COVID
Exclusiva: El covid se propaga en el recinto londinense en el que el Ministerio del Interior ha colocado a cientos de solicitantes, lo que provoca la ira del ayuntamiento ya que el brote era "totalmente predecible"
Cientos de solicitantes de asilo han sido alojados en un albergue en el que se les obliga a compartir habitaciones atestadas de literas triples a pesar del riesgo de propagación del coronavirus, según ha sabido The Independent.
Alrededor de 500 hombres se alojan actualmente en un albergue de Southwark, al sur de Londres, a pesar de que el año pasado el consejo local consideró que las instalaciones no eran seguras para albergar a personas que dormían en la calle debido a la incapacidad de mantener el distanciamiento social.
Un brote de covid en el lugar en las últimas semanas ha provocado el contagio de varias personas. El Ministerio del Interior no quiso revelar cuántas. Los residentes han informado de incidentes en los que sus compañeros de habitación han dado positivo, pero no han podido aislarse hasta varios días después.
Los residentes dijeron que más de 15 personas dormían en algunas de las habitaciones, aunque el Ministerio del Interior indicó que el máximo permitido para permanecer en cada dormitorio era de 10.
El Consejo de Southwark no fue consultado sobre el plan de trasladar a los solicitantes de asilo al albergue, y ha escrito al ministro del Interior, Priti Patel, advirtiéndole que el acuerdo plantea “riesgos inmediatos” tanto para los solicitantes de asilo como para los residentes locales.
Por su parte, los expertos en salud han alertado que colocar a tantas personas en espacios reducidos es una “receta para el desastre”.
Los solicitantes de asilo que se alojan en el albergue, que The Independent no nombra para proteger la seguridad de los residentes, comentaron que se sentían inseguros por el hecho de compartir habitación. Muchos también argumentaron que, a pesar de llevar ahí más de un mes, no habían recibido ninguna ayuda económica.
En una carta dirigida a Patel el jueves pasado, vista por The Independent, el Consejo de Southwark exigió una “intervención urgente” para garantizar la seguridad de los residentes, enfatizando que la situación planteaba “riesgos inmediatos tanto para la seguridad de los que residen [ahí] como para la comunidad en general”.
Afirmó que el brote de covid era “totalmente predecible” dado el “hacinamiento”, y señaló que el albergue se cerró durante el punto álgido de la pandemia y se consideró “no seguro” para albergar a personas que dormían en la calle. El Ministerio del Interior aún no ha respondido a la carta.
Se produce tras un importante brote de covid en el cuartel de Napier, un emplazamiento militar utilizado para alojar a solicitantes de asilo, donde los residentes dormían 14 personas por dormitorio, en enero. Más tarde se supo que Public Health England había advertido al Ministerio del Interior de que esta disposición “no era adecuada”.
El albergue, gestionado por el contratista del Ministerio del Interior, Clearsprings Ready Homes, tiene unas 100 habitaciones, de las que sólo unas 70 son independientes. Según cifras recientes facilitadas al equipo de vivienda del Ayuntamiento de Southwark, en el edificio viven entre 400 y 500 hombres.
Un residente, de nacionalidad etíope, que lleva unas siete semanas en el albergue, declaró a The Independent: “Estamos preocupados. No me siento seguro. Hay mucha gente en un espacio pequeño.
“Todo el mundo se ha quejado, pero no hacen nada al respecto. El personal dice que no puede hacer nada y que debemos hablar con el Ministerio del Interior, pero éste no responde a nuestras llamadas”.
Otro residente, de Eritrea, mencionó que hace dos semanas uno de sus compañeros de habitación dio positivo en la prueba de covid, pero siguió en la habitación compartida.
“Inmediatamente aconsejé al personal del albergue que se aislara, pero no se lo dijeron. El chico estuvo enfermo durante tres días. No teníamos máscaras en ese momento. Se puso muy enfermo y una noche tuve que llamar a una ambulancia. No fue hasta cinco días después que lo trasladaron a otra habitación”, detalló.
El joven, que dijo que huyó de la guerra civil en Eritrea en 2014 y vivió en Etiopía durante varios años, antes de tener que huir de nuevo debido a la guerra de Tigray, comentó que no había recibido ninguna ayuda económica desde que llegó.
“No tengo dinero. Tengo un par de pantalones, un par de zapatos y un jersey. No hay nadie que nos ayude. El personal dice que tenemos que contactar con Migrant Help, pero la línea está siempre ocupada”.
Un portavoz de Migrant Help, contratada por el Ministerio del Interior para apoyar a los solicitantes de asilo, aseguró que trabajaba “duramente para apoyar al mayor número posible de solicitantes de asilo” y que el tiempo medio de espera de sus llamadas en agosto fue de 13 minutos.
En su carta al Ministerio del Interior, el Consejo de Southwark también expresó su preocupación por el hecho de que la salud mental y física de los residentes “se esté deteriorando dadas las condiciones en las que se encuentran”.
Un tercer residente, procedente de Irak, que llegó al Reino Unido a principios de agosto y fue alojado en el albergue varios días después, declaró: “sólo tengo la ropa que llevo puesta. No tengo abrigo, y ahora hace más frío.
“No hay wifi ahí. Me estoy volviendo loco. No hay nada que hacer. Es una guerra psicológica. Hay 30 habitaciones en una planta y seis duchas: 120 personas para seis duchas. Esto no es bueno ni para los animales”.
Durga Sivasathiaseelan, de Médicos del Mundo, calificó la situación de: “cruel e indigno obligar a quienes buscan asilo y refugio a dormir a tantas personas en una habitación en el mejor de los casos, pero durante una pandemia mundial es una receta para el desastre”.
“Necesitamos que se ponga fin a este trato inhumano de los que buscan ayuda, y que se garantice que están a salvo del riesgo muy real de este virus”.
El concejal Kieron Williams, líder del Consejo de Southwark, confirmó: “este alojamiento ha sido reservado por Clearsprings sin ninguna consulta con nosotros, y actualmente está por debajo de los estándares mínimos que cualquier persona razonable esperaría”.
Un portavoz del Ministerio del Interior mencionó que todos sus alojamientos “deben cumplir con la legislación pertinente en materia de salud y seguridad y proporcionar su última evaluación de riesgos de salud y seguridad”.
“Debido a una demanda sin precedentes, hemos tenido que recurrir a los alojamientos temporales para gestionar las demandas en el ámbito del asilo y animamos a todas las autoridades locales a ofrecer su apoyo y colaborar con nosotros”, añadieron.
“Nos tomamos muy en serio el bienestar de los solicitantes de asilo y trabajamos estrechamente con nuestros proveedores, con Public Health England y con otras autoridades pertinentes para garantizar que se sigan de cerca todos los consejos médicos y que las personas se autoaíslen cuando sea necesario”.
Clearsprings Ready Homes declinó hacer comentarios.