¿Qué hallaron en el crematorio clandestino desvelado por una madre buscadora en México?

Las autoridades arribaron a la zona para realizar las indagatorias correspondientes; fue así que establecieron un cerco de seguridad para comenzar a recabar algunas osamentas y huesos para determinar de qué o quiénes se trataba

José Luis Montenegro
Jueves, 02 de mayo de 2024 18:58 EDT
Mariúpol | Tras los bombardeos, las fosas comunes

El pasado 30 de abril, la activista y defensora de los derechos humanos mexicana, Cecilia Flores, denunció a través de su cuenta de X (antes Twitter) el hallazgo de un presunto cementerio clandestino que, según sus dichos, operaba como un crematorio irregular.

Luego de revelarse la existencia de este predio, entre los límites de las alcaldías Tláhuac e Iztapalapa, en el corazón de la Ciudad de México, la FGJ-CDMX (Fiscalía General de Justicia de la capital) dijo que iniciarán una carpeta de investigación para esclarecer los hechos.

En pocas horas, las autoridades arribaron a la zona para realizar las indagatorias correspondientes; fue así que establecieron un cerco de seguridad para comenzar a recabar algunas osamentas y huesos para determinar de qué o quiénes se trataba.

Hasta el momento, no se tiene conocimiento del lugar exacto; pero algunas fotografías del predio, podrían indicar que se trata de un poblado a las orillas del volcán Xaltepec. El lugar no se identifica por calles y/o números debido a que sus vialidades no están pavimentadas.

Algunos internautas han referido la colonia Desarrollo Urbano Quetzalcóatl como la zona en la que se hallaron los posibles huesos humanos.

En entrevista con el medio mexicano Radio Fórmula, Flores dijo que durante sus primeras excavaciones encontraron restos humanos; pero prefirieron taparlos. Sin embargo, cuando regresaron, aseguraron que ya no estaban.

“Excavamos por muchas horas y no pudimos llegar a encontrar nada más. Es por eso que solicitamos el apoyo de una retroexcavadora para que nos ayude en el lugar”, dijo a la cadena radiofónica antes citada.

En solo unos días, la FGJ-CDMX refirió que, tras el análisis de algunos de los pedazos de hueso hallados en la zona, se pudo determinar que eran de origen animal; y especificó que se trataba de perros. Flores no compartió el resultado de las pruebas de la Ciudad de México, y detalló que ella tiene conocimiento de al menos tres cuerpos humanos.

El titular de la Secretaría de Seguridad de la Ciudad de México, Pablo Vázquez Camacho, detalló que la zona donde se encontró este cementerio irregular es de “fácil acceso” para la población; por lo que “no es una zona que pueda utilizarse para cremar cuerpos sin que nadie se dé cuenta”, recalcó.

En otro vídeo, Flores dijo que, durante la desaparición de algunos de sus familiares, ella emprendió una búsqueda exhaustiva; contabilizando hasta el momento más de 2.700 cuerpos. “Sé a qué huele la muerte y cómo se acarician los huesos que se vuelven cenizas”.

Algunas voces disidentes creen que el hallazgo del cementerio clandestino, es más bien, un montaje de Flores para buscar un cargo público. Otras madres buscadoras tildan el activismo de Flores como “oportunista”  y que “lucra con el sufrimiento ajeno”.

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