Vídeo muestra a padre y madrastra de Arthur Labinjo-Hughes comiendo helado mientras el niño pasaba hambre
El vídeo fue filmado tan solo tres días antes de que Arthur muriera
Un horrible vídeo que muestra al padre y la madrastra de Arthur Labinjo-Hughes comiendo helado mientras el niño de seis años permanecía solo y hambriento en el pasillo de su casa ha salido a la luz.
Arthur sufrió una lesión cerebral mortal mientras estaba al cuidado exclusivo de su madrastra, Emma Tustin, de 32 años, quien lo intoxicó con sal y lo privó de comida y bebida.
Tustin fue encarcelada de por vida el viernes, luego de ser declarada culpable de asesinato al agredir a un indefenso Arthur en el pasillo de su casa en Cranmore Road, en Solihull, Inglaterra, el 16 de junio de 2020.
El padre de Arthur, Thomas Hughes, de 29 años, fue declarado culpable de homicidio involuntario y encarcelado por 21 años tras alentar el asesinato de su hijo, cuyo cuerpo presentaba 130 hematomas cuando murió en el hospital.
Recientemente se publicaron imágenes que muestran a la pareja acurrucada en el sofá de su casa comiendo helado, apenas tres días antes de que Arthur fuera asesinado. Cuando se filmó el vídeo, el 13 de junio, Arthur estaba de pie, fuera de la vista, pasando hambre en el pasillo y sofocándose en una pijama de una pieza.
Otro vídeo muestra a Tustin disfrutando de una hamburguesa McDonald's.
Los vídeos, tomados con una cámara de seguridad doméstica, se mostraron durante el largo juicio de la pareja, que terminó esta semana, para resaltar aún más el grado de negligencia y tortura del que Arthur fue víctima.
Durante el juicio se supo que unos trabajadores sociales visitaron a Arthur dos meses antes de su muerte, después de que su abuela paterna, Joanne Hughes, expresara su preocupación, pero aquellos concluyeron que “no había preocupaciones sobre su protección”.
La Asociación para la Protección de la Niñez Local de Solihull inició posteriormente una revisión independiente del caso.
En su declaración sobre el impacto de la víctima, que leyó en el tribunal antes de la sentencia, Joanne Hughes dijo que Arthur, un “niño de siete años feliz, contento y en desarrollo” estaría “vivo hoy” si su hijo no hubiera conocido a Tustin.
El “encaprichamiento” de Thomas Hughes por Tustin había “eliminado” cualquier amor por su hijo, dijo el juez de sentencia.
Cuando comenzó a dictarse la condena el viernes, el juez Mark Wall QC señaló que Tustin había sido llevada a la corte para su sentencia, pero que se había “negado a subir” al banquillo de los acusados.
Después de la imposición de condena, el exministro de infancia Tim Loughton dijo que todos “nosotros” tenemos el “deber” de asegurarnos de que la atención social no abandone a otros niños vulnerables como lo hizo con Arthur.
“La financiación para la atención social de los niños ha quedado rezagada y los trabajadores sociales están sobrecargados y subvalorados, cuando en realidad deberían ser venerados como nuestro cuarto servicio de emergencia”, escribió el diputado conservador en The Sun.
“Las intervenciones tempranas para detener las causas de los problemas de protección se han convertido en intervenciones tardías para combatir sus síntomas”.
El primer ministro Boris Johnson dijo el viernes que los ministros no dejarán “absolutamente ninguna piedra sin remover” para establecer qué salió mal en el “espantoso” caso.
Un portavoz de la NSPCC (Sociedad Nacional para la Prevención de la Crueldad Infantil del Reino Unido) declaró para The Independent: “Todos seguimos esforzándonos para entender lo que Arthur Labinjo-Hughes soportó antes de que Tustin y Hughes lo mataran. La condena de ambos marca el final de la primera etapa para lograr algún tipo de justicia para Arthur”.
“La Revisión de Prácticas de Protección Infantil ahora no debe dejar piedra sin remover para determinar exactamente lo que sucedió antes de la muerte de Arthur y si se podría haber hecho más para protegerlo y, en última instancia, salvarlo. También debe ser la base para iniciar una discusión más amplia sobre cómo evitar que ocurran estos atroces casos de crueldad infantil”.