Texas pide a un tribunal que decida si la ley estatal de detención de migrantes es excesiva
Un abogado que defiende los planes de Texas de arrestar a los migrantes que entran ilegalmente en Estados Unidos dijo el miércoles a un panel de jueces federales que es posible que la ley “haya ido demasiado lejos”, pero que eso lo decidirá el tribunal.
El comentario fue hecho a un panel del Tribunal Federal de Apelaciones del 5to Circuito que ya ha frenado anteriormente la estricta medida migratoria del gobernador republicano Greg Abbott. Propuestas similares, que permitirían a la policía local detener a migrantes, se están tramitando en otras cámaras estatales dirigidas por el Partido Republicano, incluidas muchas situadas lejos de la frontera entre Estados Unidos y México.
El mes pasado, Texas pudo aplicar la ley durante unas pocas y confusas horas, antes de que fuera suspendida por el mismo panel de tres jueces que escuchó los argumentos el miércoles. No se anunciaron detenciones durante ese breve periodo.
“Lo que Texas ha hecho aquí es examinar los precedentes de la Corte Suprema e intentar desarrollar un estatuto que llegue hasta la línea de los precedentes de la Corte Suprema, pero no más allá”, dijo el abogado de gobierno de Texas, Aaron Nielson. “Ahora, para ser justos, tal vez Texas fue demasiado lejos y esa es la cuestión que este tribunal va a tener que decidir”.
El panel no indicó si creía que Texas se había extralimitado, pero más tarde interrogó a Nielson sobre los pormenores y la aplicación de la ley.
Durante la audiencia de una hora celebrada en Nueva Orleans, el Departamento de Justicia argumentó que Texas estaba intentando usurpar la autoridad del gobierno federal en materia de inmigración. Texas, sin embargo, insistió en que colaboraría con el gobierno federal.
La ley, conocida como SB4, permite a cualquier policía de Texas detener a personas sospechosas de entrar ilegalmente en el país. Una vez detenidos, los migrantes podrían aceptar la orden de un juez de Texas de abandonar Estados Unidos o ser procesados por un delito menor de entrada ilegal. Los migrantes que no abandonen el país podrían ser detenidos de nuevo por delitos más graves.
A la pregunta de cómo haría cumplir el estado las órdenes de los jueces para que los migrantes regresen al país desde el que entraron ilegalmente a Estados Unidos, Nielson dijo que serían entregados a funcionarios federales en los puertos de entrada. Luego tropezó para explicar en qué se diferencia eso de lo que está ocurriendo ahora en la frontera.