México y Argentina retiran a sus embajadores de Nicaragua
Ambos países hablarán con sus embajadores sobre la ola de arrestos de opositores al gobierno de Daniel Ortega
Los gobiernos de Argentina y México decidieron retirar a sus embajadores en Nicaragua y les pidieron que se presenten en sus respectivos países, después de que condenaron la violencia política que viven los opositores al presidente Daniel Ortega, de cara a las campañas presidenciales en esa nación centroamericana.
“Los gobiernos de México y la República Argentina informan que el día de hoy instruyeron a sus embajadores en la República de Nicaragua, Gustavo Alonso Cabrera Rodríguez y Mateo Daniel Capitanich, respectivamente, a trasladarse a sus respectivas capitales”, informaron ambos países a través de un comunicado de prensa conjunto.
Las administraciones de Alberto Fernández (Argentina) y Andrés Manuel López Obrador (México) sostendrán conversaciones con sus embajadores para consultar “las preocupantes acciones políticas-legales realizadas por el gobierno nicaragüense en los últimos días que han puesto en riesgo la integridad y libertad de diversas figuras de la oposición”, añadió el comunicado.
Ambos países anunciaron que monitorearán la evolución de la situación política en Nicaragua y expresaron su apoyo al respeto de las libertades política y los derechos humanos en ese país.
La decisión de los gobiernos de Argentina y México de llamar a sus embajadores llega tras el arresto de varios posibles candidatos presidenciales de oposición a Ortega, quien buscaría en noviembre su cuarto periodo como mandatario de Nicaragua.
Con la detención del periodista Miguel Mora el domingo, ya son cinco los precandidatos presidenciales que han sido arrestados en Nicaragua. En total, 17 opositores a Ortega han sido detenidos en las últimas semanas.
El actual presidente nicaragüense ha acusado de golpismo y de querer desestabilizar al país a sus contrincantes políticos.
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En medio de la crispación del clima político en Nicaragua, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó al gobierno de Ortega detener la represión contra sus opositores y liberar a las personas que hayan sido detenidas de manera arbitraria.
Por su parte, Human Rights Watch (HRW) denunció que las detenciones y las violaciones a los derechos humanas que están en marcha en Nicaragua parecen formar parte de una estrategia para facilitar la reelección de Ortega. Ante esto, HRW pidió a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) incrementar su participación en la crisis que se vive en ese país.
Nicaragua se dirige a celebrar el próximo 7 de noviembre sus elecciones presidenciales, en donde Ortega buscaría una vez más reelegirse como el presidente.