Rusia podría estar construyendo un láser gigante para derribar satélites, según informe
El proyecto “Kalina” está construido para la “guerra electro-óptica” y podría disparar rayos láser a los satélites
Rusia podría estar construyendo un sistema láser que podría cegar a los satélites hostiles.
El nuevo complejo, aparentemente en la instalación espacial Krona del Ministerio de Defensa ruso cerca de Zelenchukskaya, salió a la luz gracias a una investigación de código abierto publicada por The Space Review.
Al analizar imágenes satelitales públicas, documentos de solicitud de contratistas industriales rusos y documentos financieros rusos, sugieren que el proyecto “Kalina”, un sistema láser diseñado para la “guerra electro-óptica”, podría emitir pulsos láser para dañar los sensores ópticos de los satélites.
“La documentación de la licitación publicada en línea en 2015 ya había dejado en claro que Kalina presentaría un nuevo telescopio para apuntar con precisión los rayos láser a los satélites”, afirma The Space Review.
El proyecto comenzó originalmente en 2011, pero la investigación preliminar se llevó a cabo una década antes. El complejo en el que se encuentra Kalina contiene equipos de vigilancia que incluyen sistemas de radar y lidar (basado en láser) que se utilizan para identificar objetivos para telescopios espaciales.
Si bien el edificio del telescopio y el túnel que lo conecta con el edificio lidar están en su lugar, no está claro cuánto hardware se ha instalado. Su avance podría haber sufrido a causa de varias sanciones económicas impuestas a Rusia desde 2014, en concreto las relativas a la electrónica.
En noviembre del año pasado, Rusia realizó una prueba de misiles que eliminó uno de sus propios satélites.
En ese momento, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, condenó lo que dijo que era la prueba “imprudente” de Rusia que creó casi 1.500 piezas de escombros flotando en la órbita terrestre baja, donde la EEI (Estación Espacial Internacional) gira alrededor de la Tierra.
Los exastronautas, las agencias espaciales internacionales, los premios Nobel y los funcionarios gubernamentales de todo el mundo han argumentado que las ASAT (pruebas de armas antisatélite) deben detenerse debido al riesgo que representa la creación de desechos espaciales.
“Si solo una pieza de escombros de una prueba de este tipo choca con un satélite y provoca un gran evento de fragmentación, esto podría dar lugar a eventos adicionales que afecten a todos los países, que podrían incluir más fragmentaciones, fallas de satélites o interrupciones del servicio”, una carta abierta, escrito en septiembre de 2021, afirmó.