Muere Hulk Hogan: la controvertida leyenda de la lucha libre que ayudó a lanzar una industria global
El carismático ícono que ayudó a transformar la WWE en una potencia multimillonaria y cuya vida posterior estuvo marcada por la controversia, falleció a los 71 años
Hulk Hogan, quien falleció a los 71 años, fue la figura que redefinió la lucha libre profesional y la convirtió en un fenómeno global del entretenimiento.
Más que un luchador, fue un ícono cultural que ayudó a llevar la WWE desde gimnasios y canales de acceso público hasta estadios repletos, portadas de revistas y líneas interminables de productos con su nombre.
Aunque su legado se vio empañado en años recientes por controversias y decisiones empresariales fallidas, su impacto en la industria es innegable. Sin Hogan, es difícil imaginar que la lucha libre hubiera alcanzado el nivel de masividad y éxito comercial que tiene hoy.
Con su inconfundible atuendo rojo y amarillo, y un físico que él mismo describía como “un metro noventa de puro músculo y tubos de 61 centímetros, hermano”, Hulk Hogan se consolidó como la imagen viva de la lucha libre en su época dorada.
Seis veces campeón de la WWF, fue el rostro principal de múltiples ediciones de WrestleMania, impulsó la creación de la promoción rival WCW, protagonizó películas, series animadas y lanzó miles de productos, desde juguetes hasta ropa, sostenido únicamente por su carisma arrollador y talento como figura mediática.
Hogan, cuyo nombre real era Terry Gene Bollea, nació en 1953, hijo de un capataz de obras y una profesora de danza. Desde niño admiró a leyendas del ring como Dusty Rhodes y “Superstar” Billy Graham, este último una influencia clave en el estilo visual y la personalidad que luego definieron al propio Hogan.

Hulk Hogan fue descubierto en 1976 por Jack y Gerald Briscoe, dos hermanos luchadores que formaban un equipo reconocido en el circuito. Su entrada al mundo de la lucha libre no fue nada fácil: en su primera sesión de entrenamiento, el experimentado Hiro Matsuda le fracturó la pierna, lo que casi pone fin a su carrera antes de que siquiera comenzara. Sin embargo, Hogan no se dejó vencer. Diez semanas más tarde volvió al ring, y cuando volvió a cruzarse con Matsuda, bloqueó con éxito el mismo movimiento que lo había dejado fuera de combate.
Tras pasar varios años luchando en distintos territorios del circuito profesional, se unió a la WWF a tiempo completo en 1983. Su ascenso fue meteórico: en 1984 ganó su primer campeonato de la WWF tras derrotar al temido Jeque de Hierro. A partir de entonces, la Hulkamanía estalló.
Durante gran parte de la década siguiente, millones de fanáticos en todo el mundo quedaron cautivados por el atuendo rojo y amarillo del gigante rubio, su físico descomunal y una personalidad magnética que lo convirtió en un fenómeno cultural. Hogan encabezó varias ediciones de WrestleMania, incluyendo la icónica WrestleMania III, donde protagonizó un momento legendario al levantar y derribar a su eterno rival, André el Gigante, frente a más de 90.000 personas en el Pontiac Silverdome.
Pero su fama no se quedó en el cuadrilátero.
El alcance de su fama abrió las puertas de Hollywood. Su primera aparición fue en Rocky III (1982), donde encarnó a “Thunderlips”, una versión malvada de su personaje en el ring. A partir de ahí, sumó participaciones en varias películas y series de televisión.

Luego asumió papeles protagónicos en varias películas, entre ellas Hogan, el guerrero del universo, Mr. Nanny, Menudo Santa Claus y Operación trueno, esta última adaptada posteriormente como una serie de televisión con Hogan como figura central. También fue el rostro de dibujos animados y videojuegos, y protagonizó el reality Hogan Knows Best junto a su familia, durante mediados y finales de la década de 2000.
A mediados de los años noventa, Hogan dejó la WWF para firmar con la WCW, donde ayudó a convertirla en un competidor real frente al dominio que tenía la WWF en el mundo de la lucha libre. La rivalidad entre ambas empresas alcanzó su punto más intenso en 1995, cuando la WCW lanzó Nitro, un programa de lucha libre que se emitía los lunes por la noche y competía directamente con Monday Night Raw de la WWF.
En 1996, Hogan se convirtió en una pieza clave del auge de la WCW durante la llamada “guerra de los lunes por la noche”, al adoptar por primera vez en su carrera el rol de villano y formar la facción New World Order (nWo) junto a otros desertores de la WWF, Kevin Nash y Scott Hall.
Aunque la nWo fue un fenómeno en los años noventa y marcó el comienzo de la “era de la actitud” en la lucha libre —con luchadores más realistas y agresivos como The Rock y Stone Cold Steve Austin—, la WWF terminó ganando la contienda de forma definitiva y adquirió la WCW en 2001.
Como resultado, Hogan regresó a la empresa donde había nacido su leyenda y durante los años siguientes protagonizó combates memorables contra Shawn Michaels, The Rock, e incluso una lucha especialmente violenta contra el propio Vince McMahon. En 2005, Sylvester Stallone, su antiguo compañero de elenco en Rocky III, fue el encargado de introducirlo en el Salón de la Fama de la WWF.

Hogan, gran entusiasta de la mitología, era también conocido por exagerar aspectos de su ya extraordinaria vida, muchas veces llevándolos a niveles completamente inverosímiles.
Entre las anécdotas que solía contar se encuentran algunas verdaderamente insólitas: que Elvis Presley era un gran admirador suyo, a pesar de que el Rey del Rock murió en 1977, muchos años antes de que Hogan alcanzara la fama; que le ofrecieron tocar el bajo en Metallica, afirmación que el propio James Hetfield desmintió con un simple: “¿Eh? Definitivamente no”; y que, debido al cambio horario entre Estados Unidos y Japón, llegó a luchar “400 días en un solo año”.

Durante la década de 2010, la imagen pública de Hogan se vio gravemente afectada por dos escándalos de alto perfil. En 2012, se filtró en internet un video sexual protagonizado por el luchador, lo que lo llevó a iniciar una prolongada batalla legal contra el sitio de noticias de entretenimiento Gawker.
Hogan demandó a la empresa por más de 100 millones de dólares y, en 2016, alcanzó un acuerdo por 31 millones. La demanda fue financiada por el multimillonario Peter Thiel, quien presuntamente guardaba rencor al portal desde que este reveló su orientación sexual en 2007. El caso se convirtió en una de las demandas por privacidad más trascendentes en la historia de Estados Unidos y derivó en el cierre definitivo de Gawker ese mismo año.
En 2015, surgió un nuevo escándalo cuando se filtró un audio en el que Hogan utilizaba lenguaje abiertamente racista, incluyendo múltiples usos de la palabra con “n”. Aunque pidió disculpas y calificó el episodio como “el mayor error de su vida”, la WWE rompió relaciones con él, lo eliminó de futuros contenidos, incluidos documentales y videojuegos, y lo retiró del Salón de la Fama.
Sin embargo, fue reincorporado en 2018 y, desde entonces, mantuvo una relación estable con la WWE hasta sus últimos años.

En 2024, Hogan participó en la Convención Nacional Republicana en apoyo a la campaña de reelección del presidente Donald Trump.
Su aparición generó fuertes críticas por parte de fanáticos, que la interpretaron como una confirmación más de sus posturas polémicas, especialmente en torno al racismo.
A pesar de sus controversias y defectos personales, es innegable que Terry “Hulk Hogan” Bollea fue una figura clave para la lucha libre profesional.
Ningún otro luchador ha contribuido tanto al crecimiento del negocio y su legado será tan duradero como el personaje que creó. Su partida deja un vacío en su familia: su esposa y sus hijos Brooke y Nick.
Terry Gene Bollea, nacido el 11 de agosto de 1953, falleció el 24 de julio de 2025.
Traducción de Leticia Zampedri